Los indígenas ecuatorianos, que en el pasado provocaron la caída de varios presidentes, siguen su lucha contra el aumento del precio de los combustibles, provocado por un acuerdo entre el presidente Lenín Moreno y el Fondo Monetario Internacional, FMI.
Con 13 nacionalidades indígenas, Ecuador es un país multicultural y multilingüe. En total representan 25% de los 17.3 millones de habitantes del país y aunque vivan principalmente en los Andes y la Amazonía, su participación en la vida política es cada vez más importante desde 1990.
Diana Atamaint, una indígena shuar es en la actualidad la presidenta del Consejo Nacional Electoral. Ha habido también ministros, embajadores y jueces. Pero, numerosas comunidades indígenas siguen siendo olvidadas por el poder central y no disponen todavía de agua potable ni electricidad. Según el ministerio de Salud, la mitad de los niños indígenas menores de 4 años sufren de desnutrición crónica.
Continúa la protesta de indígenas en Ecuador. (Photo by Jorge Ivan Castaneira Jaramillo/Getty Images)
La mayoría forman parte de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador, Conaie, que estuvo al origen del primer levantamiento indígena, ha ganado visibilidad desde entonces y logró negociar con el gobierno 2.3 millones de hectáreas de tierras. La Conaie, que agrupa a la Ecuarunari (Sierra andina) y a Confenaie (Amanzonía), cuenta con Pachakutik, su brazo político creado en 1995. En la actualidad cuentan con 5 de los 137 escaños del Parlamento.
Aliándose con otros grupos políticos y sindicatos, los indígenas lograron movilizarse masivamente contra otras medidas impopulares y provocaron la caída de los presidentes Abdala Bucaram en 1997, Jamil Mahuad en el 2000 y Lucio Gutiérrez en 2005.
Familiares de Inocencio Tucumbe, uno de los dos indígenas muertos lloran durante su velorio. (Photo by Jorge Ivan Castaneira Jaramillo/Getty Images)
En Ecuador, 68% de los pobres son indígenas y las reformas impuestas por el FMI, ponen fin a las subvenciones de los carburantes evaluadas en 1.300 millones de dólares. Los precios de la gasolina aumentaron de más 100% y se teme por una inflación generalizada.
Los indígenas trabajan esencialmente en la agricultura y el comercio, y las medidas de Lenín Moreno significan un aumento del precio de productos que ellos producen, tales como las papas, el trigo y la cebada. En el campo utilizan camiones y camionetas para transportar su producción agrícola, lo que provocaría otro aumento del precio de sus productos. El aumento de 30% del precio del transporte público es también una muy mala noticia para las indígenas, generalmente numerosas.
La Conaie exige al gobierno que restablezca las subvenciones que según el presidente Lenín Moreno han costado 60.000 millones de dólares al Estado en las últimas 4 décadas. Para convencerlo, alrededor de 20.000 indígenas de los Andes y la Amazonía llegaron a la Quito, la capital, para protestar contra esta medida que obligó al presidente a despachar desde la ciudad de Guayaquil.
(Photo by MARTIN BERNETTI/AFP via Getty Images)
La posibilidad de reactivar el diálogo entre el Gobierno y la Conaie quedó en suspenso. Debido al fallecimiento de 2 miembros de la organización que perdieron la vida durante las movilizaciones contra la eliminación del subsidio a los combustibles.
En consecuencia, la dirigencia indígena exige el cumplimiento de 3 condiciones previas al acercamiento con el gobierno: El despido de los ministros de Gobierno, María Paula Romo y de Defensa, Oswaldo Jarrín. La segunda es la derogación del decreto 883, que elimina el subsidio a los combustibles y finalmente, que el gobierno se “haga responsable” por las personas que fallecieron durante las protestas.
RCI/AFP/elcomercio.com/france24.com/Internet
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