Los ministros de Finanzas de todo Canadá se reúnen hoy con la intención de establecer un nuevo pacto fiscal.
El encuentro, que ya estaba previsto, tiene lugar luego que las autoridades federales se manifestaron dispuestas a someter a discusión el esquema de ayuda financiera que aporta a las diferentes provincias y territorios que enfrentan dificultades.
En tal sentido, el ministro federal del área, Bill Morneau, aseguró que no se adoptaría ninguna decisión sin llevar a cabo conversaciones con sus pares del resto del país, para conocer sus puntos de vista e informarse sobre sus principales preocupaciones.
El ministro Morneau busca un acuerdo con las provincias. THE CANADIAN PRESS/Justin Tang
Según las disposiciones adoptadas en los últimos días, cinco provincias recibirán pagos durante el año fiscal que comenzará en abril de 2020. Ellas son Manitoba, Quebec, Nuevo Brunswick, Nueva Escocia y la Isla del Príncipe Eduardo.
El total de los recursos que serán girados a esos distritos alcanza a 20.600 millones de dólares.
En términos generales, las transferencias federales a todo el país, para el período 2020-2021, sumarán 81.646 millones de dólares, e incluyen los rubros de Salud y Seguridad Social, entre otros, según datos que figuran en el sitio Internet del ministerio canadiense de Finanzas.
Las autoridades en Ottawa ya ha sido objeto de críticas por parte de los ministros provinciales, por los criterios con los que se distribuye la ayuda federal.
Algunas provincias sostienen que dichos fondos no responden a sus necesidades, lo que les impide brindar servicios de calidad, a la altura de los que reciben otros canadienses.
Alberta complicada por la baja del precio del petróleo. AP Photo/Charlie Riedel, File.
El primer criterio que se utiliza a la hora de dividir el dinero entre las provincias es el tamaño de la población de cada una.
En tal sentido, de los poco más de 20.000 millones comprometidos, 13.300 serán entregados a Quebec, ya que es la provincia que cuenta con el mayor número de habitantes entre las cinco nombradas más arriba.
Pero otras jurisdicciones, como es el caso de Alberta, han expresado su malestar, al considerar que el criterio de la proporción de población no es el más adecuado, y que el mismo implica una punición para las provincias cuya actividad económica se encuentra más desfavorecida.
La caída de los precios internacionales del petróleo ha afectado negativamente las finanzas de Alberta,
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