La expectativa de vida de los hombres canadienses se mantuvo estable por tercer año consecutivo a nivel nacional, mientras que retrocedió en la provincia de Columbia Británica, aparentemente como consecuencia del consumo de opioides.
Cifras dadas a conocer este martes por el gobierno canadiense indican que la expectativa de vida de la población masculina canadiense se mantiene invariable, en 79.9 años.
Por su parte, las mujeres registraron un leve incremento en la cantidad de años que pueden esperar vivir, pasando de 84 años a 84,1.

Los medicamentos recetados pueden ser el primer paso a una adicción. Foto: iStock.
Causas del estancamiento
Según el trabajo difundido por la agencia de estadísticas, la estagnación de la expectativa de vida entre los hombres se debe, principalmente, a un aumento de la mortalidad entre los 25 y 45 años de edad.
Las causas de deceso para dicho segmento de la población aparecen ligadas estrechamente a la crisis en el consumo de sustancias opioides, que afecta a una parte del país desde hace algunos años, con principal incidencia en la provincia de Columbia Británica.
Según el Centro Canadiense sobre el Uso de Sustancias y las Adicciones, la situación planteada con el consumo generalizado de esas sustancias es resultado de factores múltiples, entre los que hay que citar una postura equívoca respecto al riesgo de adicciones provocadas por las prescripciones; riesgos psicológicos, sociales y biológicos; falta de información y consejos; acceso a drogas mezcladas con fentanyl y equivalentes y falta de cuidados integrales para responder a las necesidades en materia de salud física y mental.
Para la población masculina enmarcada en otras edades la situación difiere. Por ejemplo, la extensión en la expectativa de vida para los hombres de 65 años de edad pasó de 19,3 años en 2017 a 19,4 en 2018.

Numerosas personas recibieron intrucción para reanimación. THE CANADIAN PRESS/Darryl Dyck
A la baja
Las dos provincias canadienses más afectadas por la crisis de los opioides, Columbia Británica y Ontario ofrecen una expectativa de vida más baja para los hombres que la que ofrece el resto del país.
La provincia del oeste canadiense presentó la declinación más pronunciada, con 0,2 año, registrando una tendencia negativa por tercer año consecutivo.
En 2015, antes que el consumo de opioides impusiera el nivel de emergencia sanitaria, la expectativa de vida de la población masculina llegaba a 80,5 años.
El dato cobra una significación elocuente si se toma en cuenta que el mismo constituía la esperanza de vida más alta del país. En efecto, antes de los opioides, Columbia Británica constituía el territorio canadiense donde los hombres podían aspirar a vivir más longevamente.
En 2018 la situación cambió dramáticamente; mientras que en la provincia de la costa del Pacífico los hombres pasaron a tener una esperanza de vida de 79,9 años, otras provincias tomaron la posta, como en los casos de Ontario con 80,3 años y Quebec con 80,9.
Según el estudio, la mortalidad sigue subiendo entre la población masculina columbianobritánica de 25 a 50 años de edad, en una tendencia que se viene constatando desde 2016.

Material de prevención fue repartido entre los pobladores. THE CANADIAN PRESS/Chad Hipolito
Las cifras se explican por el hecho de que las muertes provocadas por el consumo de sustancias opioides suelen ser más frecuentes entre los hombres que entre las mujeres, para todas las edades.
En el caso de Ontario, el relevamiento constata una leve baja en la esperanza de vida de los hombres al nacer.
La caída es del orden de 0,1 año y también aparece ligada a la mortalidad más alta entre los adultos entre los 25 y los 50 años.
Por el contrario, las posibilidades de una vida más larga son mayores en Quebec, Saskatchewan, Nuevo Brunswick, Nueva Escocia y Terranova y Labrador.
En referencia a las mujeres, una leve baja se constató en Nuevo Brunswick, Territorios del Noroeste y Nunavut.
En otras provincias y territorios, la expectativa de vida tanto de los hombres como de las mujeres permanece estable.

El naloxone es usado para contrarrestar los efectos de los opioides. Foto: iStock.
Cifras
Según cifras oficiales del ministerio canadiense de Salud, la crisis de los opioides en el país provocó 13.900 muertes entre enero de 2016 y junio de 2019. Del total de esos decesos, 75 por ciento correspondió a hombres y 25 por ciento a mujeres.
El 94 por ciento de las muertes fueron accidentales.
En el 80 por ciento de los casos, la sustancia utilizada fue el fentanyl o una equivalente.
Por su parte, las hospitalizaciones ligadas al consumo de esas sustancias sumaron 17.050, hasta marzo de 2019. El 38 por ciento de las internaciones correspondió a pacientes mujeres y el 62 por ciento a hombres. Uno de los momentos más complicados se produjo entre enero y marzo de 2019, cuando se registraron 1.223 ingresos en hospitales.
La totalidad de las provincias y territorios canadienses reportaron casos de sobredosis entre enero y septiembre de 2019, correspondiendo el 28 por ciento de los mismos a mujeres y el 72 por ciento a hombres.
La población más afectada por esa situación se ubicó entre los 30 y 39 años de edad.
Fuentes: Estadisticas Canada / Ministerio Canadiense de Salud / Centro Canadiense sobre el Uso de Sustancias y las Adicciones
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.