El gobierno de la provincia canadiense de Nuevo Brunswick anunció que tomará las previsiones necesarias para asistir a la población, en caso que se produzcan las habituales inundaciones de primavera.
El jefe del gobierno provincial, Blaine Higgs, dijo que su administración está adoptando los recaudos necesarios para ayudar a los eventuales afectados, en momentos en que la población hace frente a la amenaza que significa la pandemia del coronavirus.
Primer ministro provincial, Blaine Higgs. Foto: THE CANADIAN PRESS/Stephen MacGillivray.
El ministerio de Medioambiente y las administraciones municipales pusieron al día sus equipos y tecnología informática, para poder predecir con mayor exactitud la posibilidad de inundaciones que, al igual que en otras provincias del país, suelen afectar a Nuevo Brunswick, cuando el aumento de las temperaturas produce el deshielo de las acumulaciones de nieve que dejó el invierno.
Del mismo modo, esa actualización tecnológica permite que los pronosticadores puedan seguir llevando a cabo sus tareas, mientras se hallan cumpliendo con el aislamiento domiciliario impuesto por las autoridades.
Higgs mantuvo contacto con los jefes militares presentes en la región, para asegurarse que las fuerzas puedan brindar asistencia a los habitantes, en caso de necesidad.
El ejército es llamado cada año a dar ayuda a las víctimas de las inundaciones en distintas partes del territorio canadiense, sin embargo, el año último hubo voces de descontento entre algunos de los mandos, que consideraron que esa tarea resta tiempo y esfuerzos para que las tropas se preparen adecuadamente para su función específica, que es la defensa.
El ejército siempre ha colaborado en situaciones de catástrofe. Foto: THE CANADIAN PRESS/Andrew Vaughan.
Del mismo modo, esas quejas fueron vistas por algunos observadores como el resultado de las compresiones presupuestarias a las que se han visto sujetas las fuerzas armadas recientemente.
No obstante, el primer ministro provincial se mostró muy satisfecho por la ayuda brindada por los militares durante las inundaciones del año último y confió en que si el clima se comporta de manera más benigna, este año no será necesaria esa contribución.
En los últimos años, la provincia registró inundaciones récord, que produjeron daños importantes en la infraestructura provincial, así como en viviendas y establecimientos particulares.
Por otro lado, y también en relación con las consecuencias que trae aparejada la pandemia del COVID-19, la firma Agnico Eagle Mines anunció que reducirá sus operaciones en la región de Abitibi, en la provincia de Quebec.
La firma minera comunicó su decisión luego que el gobierno provincial pidió a las empresas del sector que reduzcan sus operaciones, para minimizar el impacto ambiental durante la pandemia.
De todas formas, la empresa, que cuenta con yacimientos en México y Finlandia, dijo que no planea alterar su actividad en esos sitios.
Con información de The Canadian Press.
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