Ottawa se ha comprometido a aportar 8,9 millones de dólares en concepto de nueva asistencia internacional para garantizar que las mujeres y las niñas de todo el mundo tengan un acceso seguro al aborto y a los servicios de salud reproductiva durante la pandemia de COVID-19.
Desde que llegó al poder en 2015, el gobierno del primer ministro Justin Trudeau se comprometió a aumentar la ayuda internacional para la salud de mujeres y niñas de todo el mundo, con respecto a la salud reproductiva y acceso al aborto.
Ese compromiso se manifestó en varias ocasiones durante conferencias y encuentro internacionales.
Aproximadamente 830 mujeres mueren cada día por complicaciones relacionadas con el embarazo o el parto, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Y el 99% de las muertes maternas ocurren en países en desarrollo. África está particularmente afectada por estas muertes prevenibles..Photo Credit: Graeme Robertson/Getty Images)
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En uno de ellos en Vancouver, en junio de 2019, durante una importante conferencia mundial sobre igualdad de género organizada por Canadá, el Primer Ministro prometió que aumentará de manera substancial su financiamiento para la salud de mujeres y niñas en todo el mundo a partir de 2023.
Monto de la ayuda: $1.4 mil millones por año, durabnte 10 años, con la mitad de este dinero dedicado a los derechos de salud sexual y reproductiva.
En esa ocasión, como país anfitrión, Trudeau pronunció un discurso en el que remarcó que se estaba viendo un retroceso en los derechos de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo.
“Al progreso feminista se lo está atacando. Las mujeres enfrentan la discriminación y la desigualdad a diario, es la norma. Los derechos retroceden y los políticos ceden de manera vergonzosa. Estamos acá porque creemos en un futuro mejor y porque las mujeres se resisten a retroceder».
-Justin Trudeau, primer ministro de Canadá.
Ya en junio del año pasado comenzaron movilizaciones en Estados Unidos contra el derecho de las mujeres a abortar.
El 23 de enero 2017, unos días después de asumir el cargo, el presidente Donald Trump firmó un decreto que prohíbe la financiación de las organizaciones internacionales que practican o apoyan el aborto. Una ayuda esencial, cuando se cuentan cientos de miles de muertes maternas cada año en todo el mundo.
Desde ese entonces, varios estados, entre ellos, Georgia, Arkansas, Ohio, Texas, Mississippi, Tennessee, Alabama y Louisiana, se han pronunciado en favor del endurecimiento de la ley con respecto a la interrupción voluntaria del embarazo.
Un grupo de trabajo de las Naciones Unidas publicó una declaración el mes pasado expresando su preocupación de que algunos estados de EE. UU «parecen estar manipulando la crisis» de la pandemia para implementar restricciones al aborto. .
En ese sentido la decisión del gobierno canadiense despierta por hacer hincapié en la necesidad de hacer de estas iniciativas una prioridad en medio de la pandemia.
Canadá está dedicando $ 8.9 millones en nueva ayuda internacional para garantizar que las mujeres y las niñas de todo el mundo tengan acceso seguro a servicios de aborto y salud reproductiva durante el COVID -19 pandemia. La ministra de Desarrollo Internacional Karina Gould. responde a una pregunta durante una conferencia de prensa en Ottawa, el lunes 8 de abril de 2019.Canadian Press/ Adrian Wyld
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La Ministra de Desarrollo Internacional, Karina Gould, dijo esta semana que la pandemia ha hecho que el acceso a los anticonceptivos, los servicios de aborto y la atención de la salud reproductiva para las mujeres sea más difícil en algunos países.
“Creemos que es importante, particularmente en este momento, hacer este anuncio de financiación para demostrar que seguimos comprometidos con la salud y los derechos sexuales y reproductivos, incluso durante una pandemia – y para destacar el hecho de que estas necesidades existen y, de hecho, se ven exacerbadas por la actual pandemia. Esta financiación ayudará a garantizar la prestación de estos servicios”.
– Karina Gould, Ministra de Desarrollo Internacional
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«Durante la crisis del COVID-19, la violencia de género alcanzará nuevos niveles”, analiza Oxfam.
De los 8,9 millones de dólares anunciados el martes, 4,9 millones irán a “Marie Stopes International”, con sede en Londres, que trabaja en 37 países de todo el mundo para ayudar a las mujeres y niñas a tener hijos por elección, no de casualidad.
La contribución de Canadá se utilizará para garantizar el acceso al aborto en condiciones de seguridad y a los anticonceptivos; la telemedicina y la educación en línea; y una plataforma de telefonía móvil para los jóvenes aislados y los que no asisten a la escuela.
Otros 2 millones de dólares irán a mano de Ipas, otra organización internacional que trabaja con los gobiernos para abogar por el aborto legal y seguro y para que la anticoncepción esté ampliamente disponible. El organismo tiene fuerte presencia en África, Asia y Latinoamérica.
Cada año, 25 millones de mujeres y niñas en todo el mundo tienen abortos inseguros. Estamos trabajando para llevar ese número a cero.
– Ipas
OXFAM Canadá dice que impacto de COVID en mujeres es devastador
Diana Sarosi, Directora de Política y Campañas de Oxfam Canadá, se declaró alentada por la nueva financiación anunciada por el gobierno canadiense. No obstante, señaló que los 8,9 millones de dólares están muy por debajo de los 1.400 millones de dólares prometidos el año pasado por el Primer Ministro Trudeau para la asistencia internacional a la salud de la mujer, la mitad de los cuales estaba consagrada a garantizar el acceso a los abortos en condiciones seguras y a los servicios de salud reproductiva en todo el mundo.
Oxfam Canadá se declara preocupada en estos momentos porque COVID-19 se está acelerando en los países más pobres.
“Las mujeres constituyen el 70% de los trabajadores de la salud en todo el mundo. Cada día ponen sus vidas en juego cuidando a los infectados por esta pandemia”.
Y a medida que aumente la necesidad de dinero en las familias por la crisis económica desatada por la pandemia, se dispararán los matrimonios infantiles y los matrimonios forzados precoces, ya que las hijas son vendidas para casarse, añade el organismo.
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También dice que la violencia contra las mujeres aumenta en tiempos de crisis.
“Durante el brote del Ébola en 2014-2015, las mujeres y las niñas experimentaron altas tasas de violencia y violación, en lo que se denominó la «epidemia silenciosa».
«Durante la crisis del COVID-19, la violencia de género alcanzará nuevos niveles”, analiza Oxfam.
En ese sentido, Diana Sarosi sostuvo que la inversión prometida en Vancouver aún no había comenzado a desplegarse, por lo que «el desafío ahora no es sólo mantener los servicios que existían antes de la pandemia, sino crear realmente la capacidad de los sistemas de salud para ocuparse de una serie de áreas desatendidas, como la atención anticonceptiva o los servicios de aborto», dijo.
“Esperamos realmente que el gobierno intensifique la implementación de este compromiso masivo, por el cual ha recibido muchos premios alrededor del mundo”.
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La presse canadienne-Oxfam Canadá- CBC- Radio Canadá.
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