Viviendas en venta en Toronto ( Foto: Graeme Roy/The Canadian Press)

Las pequeñas viviendas pueden ser algo grande para Toronto

Los concejales de Toronto, la ciudad más grande de Canadá, con unos tres millones de habitantes, están a un paso de legalizar un nuevo tipo de vivienda: las suites de jardín.

A veces conocidas como las habitaciones de la abuela o cocheras, éstas son estructuras que ya existían o fueron construidas a propósito, en la parte trasera de algunos patios traseros en los que la gente puede vivir legalmente.

El comité de vivienda de la ciudad se reunirá este martes para iniciar las consultas sobre un nuevo reglamento que legalizará y regulará esas unidades habitacionales.

El impulso en favor de la legalización de las suites de jardín ocurre en un momento en que Toronto se encuentra en medio de una crisis de vivienda asequible. Debido a la especulación y la falta de medidas de control, los precios de las viviendas están fuera del alcance de gran parte de la población y la lista de espera para acceder a una vivienda asequible tiene casi 80.000 personas.

Meg Marshall dice que el interés de la alcaldía de Toronto de considerar seriamente la legalización de las suites de jardín es un paso positivo para aliviar la escasez de viviendas, y posiblemente una forma de que los miembros de la generación del milenio tengan un techo propio en un mercado inmobiliario extremadamente especulativo y caro. (Foto: Pelin Sidki/CBC)

Michelle Senayah, fundadora del Proyecto Laneway, un grupo de apoyo a la iniciativa señaló que la legalización de esas viviendas permitirán una lenta densificación de los barrios de la ciudad.

La diferencia entre las suites que dan a la calle, legalizadas hace unos dos años, y las suites de jardín es que las primeras tienen que tener un acceso trasero separado, mientras que las suites de jardín no.

Senayah dijo que esta iniciativa permitirá a los adultos mayores envejecer en los mismos barrios en los que han vivido. «Nos permite aumentar la población allí donde ya existe una infraestructura social, como bibliotecas, escuelas y centros comunitarios», dijo.

Para Meg Marshall, que comparte una casa cerca de las calles Bloor West y Dufferin con su tía, las suites de jardín significan otro tipo de promesa: 


«Como parte de la generación del milenio, tratar de comprar una propiedad por mi cuenta, soltera, sin hijos, como soltera, es realmente difícil. Así que en esta etapa de mi vida, esto es lo mejor que puedo hacer para tener un patrimonio y tener una propiedad a mi nombre.»

Meg Marshall.


La casa de la familia Marshall ya tenía una cochera en la parte trasera, pero como no había un callejón adyacente, la familia no podía usarla como vivienda.

Un nuevo complejo de casas adosadas en construcción en Toronto. Se necesita alrededor de un millón de dólares para comprar una casa en Toronto. (Foto: THE CANADIAN PRESS/Nathan Denette)

Meg Marshall espera poder renovarla y llamarla como su hogar tan pronto como el nuevo reglamento que regula las suites de jardín sea aprobado por el consejo municipal de Toronto, algo que la concejal Ana Bailão, que preside el comité de vivienda, dice que podría suceder el próximo verano.

El siguiente paso en este proceso será llevar a cabo consultas públicas, tras lo cual se espera un informe que será enviado al comité de vivienda en la primavera de 2021.

Ese informe servirá para establecer las regulaciones necesarias para las nuevas suites, como la distancia mínima necesaria desde la casa principal, las alturas máximas y la sombra creada, así como dónde se podrían colocar las ventanas.

Para tener una idea de los costos de la vivienda y la posibilidad de comprar un techo propio en Toronto, el precio promedio de una vivienda en la ciudad se sitúa entre los 944.000 y 1.007.000 dólares, mientras que el salario mínimo actual es de 14 dólares con veinticinco centavos por hora. 

Fuentes: CBC / M. Smee / Canadian Press / RCI

Categorías: Economía, Sociedad
Etiquetas: , , ,

¿Encontró un error? ¡Pulse aquí!

Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.