Los crímenes de odio siguieron en aumento en Canadá antes de la llegada de la pandemia, según se puede concluir de un nuevo reporte de la agencia nacional de estadísticas.
Las cifras, obtenidas a partir de los documentos policiales, muestran que los crímenes cometidos a partir de cuestiones raciales, de género o religiosos fueron más frecuentes en 2019 con respecto al año precedente.
Odio en aumento
Según las estadísticas de las que da cuenta la agencia, en 2019 se registró un alza del 7 por ciento de las ofensas motivadas por el odio. En el año anterior, el total de esos incidentes había llegado a 1.817, mientras que 12 meses después las cifras habían trepado a 1.946.
En promedio, 1.518 delitos relacionados con el odio fueron reportados por los cuerpos policiales cada año desde 2009, lo que indica, además, que 2019 marcó un récord de ese tipo de crímenes en la última década.
Los actos delictivos motivados por odio ese año representaron el 5 por ciento del total de crímenes denunciados en todo Canadá, que llegaron a 330.000, aunque el documento destaca que cerca de dos tercios de los hechos no llegan a ser reportados a la policía.
La comunidad negra se encuentra entre los objetivos de ataque más frecuentes. Foto: iStock.
Alza territorial
En 2019, 8 de las 10 provincias y los 3 territorios canadienses registraron un aumento de los crímenes de odio informados.
La mayor alza se dio en Columbia Británica con 49 incidentes más que el año anterior, Ontario 43 y Quebec 23.
Por su parte, Alberta fue la única jurisdicción que dio cuenta de una disminución de ese tipo de hechos, con 38 casos menos, al tiempo que Nueva Escocia no registró cambios.
Si se toma en cuenta el número de hechos en proporción a la cifra de habitantes de cada provincia, una vez más Columbia Británica encabeza el listado, con 6,1 crímenes por cada 100.000 personas, Ontario 5,9, Quebec 4,8 y Alberta 4,7.
Las zonas metropolitanas fueron el escenario privilegiado por los delitos relacionados con el odio, acaparando el 84 por ciento de los mismos. Sin embargo, si hablamos del incremento de este tipo de agresiones, el mismo fue mayor en las ciudades pequeñas y pueblos, con el 67 por ciento de aumento, lo que constituye toda una novedad en la materia.
Los cultos religiosos, otro de los blancos de los odiadores. Foto: iStock.
Con y sin violencia
Los hechos que pueden tipificarse como no violentos, es decir, aquellos que no se ejercieron directamente sobre una persona, constituyeron el 56 por ciento de los casos reportados en 2019, aunque el incremento de agresiones se dio en sendas categorías.
Entre los crímenes no violentos que impulsaron las cifras hacia arriba, sobresalen las faltas de tipo general, como por ejemplo el vandalismo, con el 7 por ciento del aumento de los casos.
Por su parte, los actos que involucraron violencia implicaron agresiones comunes, con una suba del 24 por ciento y amenazas 12 por ciento.
Las faltas comunes, incluyendo los ataques sobre la propiedad, que habitualmente tienen como objetivo privilegiado los lugares de culto, fueron los crímenes de odio más frecuentes, con el 45 por ciento del total.
La orientación sexual también fue motivo de ataques. Foto: iStock.
Raza y etnia en la mira
Los integrantes de las llamadas minorías visibles, aquellas que se definen por la raza o etnia de las personas, reportaron cerca del 20 por ciento de los actos que involucraron discriminación, con las personas de origen árabe y negras en primer lugar.
Cerca del 46 por ciento de los delitos de odio reportados en 2019 involucraron la raza y la etnia de la víctima, con 876 casos denunciados a lo largo del año, 10 por ciento más que en 2018.
La población negra registró 40 hechos más que en el año precedente, con un aumento del 14 por ciento de las agresiones y 35 casos más para las personas árabes, que se tradujeron en incremento del 38 por ciento.
2019 constituyó el año de mayor cantidad de crímenes de odio contra las personas negras en Canadá en la década, tomando como año de partida el 2009.
Por su parte, los incidentes dirigidos a las poblaciones indígenas constituyeron el 2 por ciento de los casos, siempre tomando en cuenta los hechos que llegan a la denuncia policial.
Los pueblos originarios concentraron una porción reducida de las agresiones. THE CANADIAN PRESS/Darryl Dyck
Orientación sexual
Las minorías sexuales, que involucran a cerca de 1 millón de personas en el país, también manifestaron ser víctimas de crímenes de odio.
Las denuncias de ataques relacionados con la orientación sexual totalizaron 263, un aumento del 41 por ciento con respecto a 2018.
La cifra también se tradujo en un récord para la década.
El 88 por ciento de las agresiones estuvieron destinadas a homosexuales y lesbianas, 2 por ciento a bisexuales, 6 por ciento a otras orientaciones y 4 por ciento a personas con orientación desconocida.
El debate sobre el racismo ha estado presente en la sociedad canadiense. Foto: iStock.
Menos ataques por religión
En el caso de los delitos motivados por la pertenencia de la víctima a un credo religioso específico, el total de sucesos denunciados llegó a 608, lo que significa una reducción del 7 por ciento con relación a los registros del año precedente.
Fuente: Agencia canadiense de estadísticas.
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