La justicia estadounidense se niega a abrir el expediente del cineasta Roman Polansky y lo amenaza de encarcelarlo si regresa a Estados Unidos, 40 años después de las acusaciones que pesan sobre él.
El juez Scott Gordon del Tribunal Superior de Los Ángeles, estima en su decisión hecha pública este lunes que no tiene “base suficiente o convincente para reexaminar el tema”.
El abogado del cineasta, Harland Braun, había pedido a la Corte Superior de Los Ángeles que revelara el testimonio del procurador en 1977, que debía establecer que Polansky había concluido un acuerdo que le evitaba la cárcel.
Reaccionando al fallo, Harland Braun declaró que se trata de “una tentativa más de parte del tribunal superior de Los Ángeles de cubrir su mala conducta en el pasado”, evocando “la corrupción” del sistema judicial.
Roman Polansky hizo saber que quería regresar a Estados Unidos para poner fin a este litigio.
En un alegato fechado de 1977, el cineasta se declaró culpable a una acusación de corrupción de menores, por haber tenido una relación sexual con Samantha Gailey, que tenía 13 años en esa época, durante una sesión de fotografía en Los Ángeles.
Se le había ordenado al cineasta en ese momento de pasar un examen psiquiátrico en la cárcel del estado de Ohio, donde estuvo detenido durante 42 días.
Después de haber aceptado un acuerdo con el procurador, Polansky huyó de Estados Unidos temiendo una larga pena de cárcel si el acuerdo era anulado. Desde entonces el cineasta no regresó jamás a Estados Unidos.
Radio Canadá/Agencia France Presse
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