La Comisión Canadiense de Radio, Televisión y Telecomunicaciones, CRTC, castigó con sendas multas a partidos políticos, parlamentarios y empresas de mercadeo por teléfono por violar las normas que rigen las llamadas telefónicas automáticas.
Los partidos federales Conservador y Neodemócrata, los conservadores de Ontario, la Asociación política Wildrose Alliance, el parlamentario liberal Marc Garneau, el conservador Blake Richards y la firma de telemarketing con sede en Edmonton, RackNine Inc. fueron sancionados colectivamente con una multa de 369,000 dólares.
La CRTC señaló que las multas son el resultado de una amplia investigación en torno al uso de llamadas telefónicas automáticas.
El ente regulador informó que hasta el momento la Asociación política Wildrose Alliance, con sede en Alberta, los conservadores de Ontario, el Nuevo Partido Democrático, la empresa RackNine y el parlamentario Garneau pagaron ya sus multas.
Todavía no han pagado su multa el Partido Conservador de Stephen Harper, que debe pagar 78.000 dólares, y el parlamentario conservador Richards, sancionado con una multa de 14.400 dólares. Ellos tienen 30 días para cumplir con la sanción.
La empresa RackNine recibió una multa de 60.000 por haber llevado a cabo unas 15 campañas de llamadas telefónicas automáticas, o “robocall” entre marzo de 2011 y 01 de febrero 2013 en nombre de “un número de clientes” entre los que se incluyen los conservadores de Harper.
Según el periódico Ottawa Citizen, RackNine trabajó para la campaña federal de los Conservadores y para por lo menos nueve candidatos conservadores, incluyendo el propio Stephen Harper.
RackNine se vio envuelta en el llamado escándalo de llamadas telefónicas automáticas, en las que un dudoso personaje, conocido sólo como Pierre Poutine utilizó esta empresa para hacer miles de llamadas telefónicas automáticas el día de las elecciones federales en Canadá para dirigir a los electores en Guelph, Ontario, a centros de votación equivocado con el propósito de impedirles votar.
La compañía dijo que no tenía nada que ver con el fraude.
La Comisión Canadiense de Radio, Televisión y Telecomunicaciones, CRTC, dijo que continúa investigando otros casos de llamadas telefónicas automáticas indebidas.
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