Según un informe anual publicado este martes, más de la mitad de los adultos canadienses tienen un diploma de estudios colegiales o un grado universitario, lo que representa el índice más elevado de los países miembros de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico, OCDE.
En total 27% de los canadienses tiene un título universitario contra 23% en promedio para los otros países de la OCDE. Y Canadá, con 25%, cuenta la proporción más elevada de diplomas de estudios colegiales.
Para la presidenta del Consejo de ministros de Educación de Canadá, Ramona Jennex, Canadá tiene muy buenas razones de sentirse orgulloso de su éxito en el plano educativo. Ramona Jennex, que es ministra de Educación y Desarrollo de la niñez de la provincia de Nueva Escocia, previene no obstante que la situación en el mundo está evolucionando. Ella juzga indispensable que un número cada vez mayor de ciudadanos goce de una educación y una formación de nivel avanzado.
En el transcurso de los últimos años, los datos del informe Mirada sobre la Educación mostraron las ventajas de un diploma post secundario cuando la coyuntura económica es delicada. Se estima que una persona que posea un diploma colegial o un grado universitario puede realizar ingresos más importantes durante toda la vida, pero además minimiza los problemas del desempleo.
Un nuevo indicador de la OCDE sobre el impacto social de la educación hace una correlación entre los estudios y la higiene de vida. En efecto, las personas que tienen un diploma de estudios colegiales o universitarios son netamente menos susceptibles de fumar que los que no terminaron la escuela secundaria. Corren además, menos riesgos de sufrir de obesidad.
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