El pasado 7 de noviembre el gobierno de la provincia de Quebec presentó finalmente su controvertida declaración de valores en la Asamblea Nacional. Se trata del Proyecto de ley 60.
El título oficial del documento presentado en la capital Quebec es “Declaración de afirmación de los valores del laicismo y la neutralidad religiosa del Estado, así como de la igualdad entre hombres y mujeres y el encuadramiento de las solicitudes de acomodamiento.”
Bernard Drainville, el ministro responsable de este proyecto de ley, señaló que el título del documento fue elegido por los abogados del gobierno que trabajaron en su redacción.
Este proyecto de ley del actual gobierno minoritario del Partido Quebequense obligará a los empleados públicos a quitarse los velos religiosos musulmanes, los turbantes sikh, las kipás judías y los crucifijos católicos si quieren conservar su puesto de trabajo. Esta ley prohibirá el portar un signo religioso “ostentatorio”.
Este proyecto de ley podría ser el caballo de batalla del Partido Quebequense en una posible elección en esta provincia francófona canadiense.
Pauline Marois, la líder del Partido Quebequense, encabeza un gobierno minoritario por lo cual tendrá dos opciones básicas: diluir el proyecto de ley para conseguir su aprobación en la Asamblea provincial o conservarlo en su integridad, abriendo con ello una nueva campaña electoral.
Actualmente se llevan a cabo en la ciudad de Quebec sesiones de debate sobre la necesidad y los fundamentos de esta declaración que, desde la perspectiva del gobierno, busca garantizar la igualdad de derechos entre hombre y mujer, sobre todo tomando en cuenta las prácticas culturales religiosas que traen los inmigrantes, en las cuales la mujer no goza de los mismos derechos que el hombre.
En entrevista desde Lisboa con Radio Canadá Internacional, Dominique Peschard, el presidente de la Liga de Derechos y Libertades, sostiene que ese Proyecto de ley 60 debe ser retirado, porque es una ley injustificable y porque socava las libertades fundamentales.
Peschard señala que el debate desatado en torno a esta declaración de valores de Quebec ya ha causado daños al tejido social de la provincia, porque ha permitido la eclosión de expresiones de discriminación racial.
La Liga de Derechos y Libertades es un organismo de la sociedad civil en Montreal, Quebec, afiliado a la Federación Internacional de Ligas de derechos Humanos. Tiene como misión la defensa y la promoción de todos los derechos humanos reconocidos por la declaración Internacional de derechos Humanos.
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.