Della Wolf Kangro Wiley Richards, de tres meses de edad, tiene tres padres legales que aparecen en su certificado de nacimiento.
Sus dos madres, Danielle Wiley y Anna Richards, son un matrimonio de lesbianas de Vancouver, en la provincia canadiense de Columbia Británica, y él, Shawn Kangro, es un amigo de la pareja que fue el donante de esperma.
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Éste es el primer caso en que se ha podido registrar a una niña con tres progenitores, algo que pudo hacerse gracias a la modificación, en marzo 2013, de la ley de familia de la provincia. En Canadá, donde es posible que un donante sepa qué hijos se han engendrado con su esperma, ya ha habido casos en que los tribunales han reconocido el derecho de ese padre respecto a su hijo, y de ese descendiente respecto a su progenitor, pero habían sido casos excepcionales resueltos en los tribunales después de nacer el hijo.
Las mamás querían un papá, no sólo un donante
La historia comienza cuando Danielle Wiley y su esposa, Anna Richards, se enfrentan a un problema que muchas parejas encuentran: cómo quedar embarazada.
«Ambas, desde el principio, queríamos tener un padre que en realidad sería un activo participante», dijo Wiley.
«Conozco a un montón de otras parejas de lesbianas que no quieren eso. Quieren un donante anónimo. Pero a ambas nos gustó la idea de alguien que podría involucrarse, y que podría ser una figura paterna para nuestros hijos.»
Shawn Kangro, un viejo amigo de Richards, parecía la elección obvia.
«Cuando Anna y Danielle me hablaron, al instante pensé que iba a decir que sí, aunque tuve que discutir un montón de cosas primero conmigo mismo», dijo Kangro.
Él aportó el semen y Danielle se autoinseminó con una jeringa.
El contrato
Antes de que Della fuera concebida, los tres comenzaron a crear un contrato por escrito, para dejar en claro cómo funcionaría su familia.
El contrato estipula que las mujeres serán las madres de la niña, tendrán su tutela y serán las encargadas de mantenerla. Es decir, serán las madres en sentido tradicional, y vivirán con la niña.
Él queda como un tutor de la hija en caso de que ellas falten, y puede visitar a la familia siempre que quiera. También tendrá voz en asuntos clave, como los que tengan que ver con la escolarización de la pequeña o las decisiones médicas. Para ello se le garantizará acceso a su historia clínica.
Los certificados de nacimiento ahora permiten hasta 4 padres
Este contrato era el requisito legal en la provincia, aunque la burocracia les puso algunos obstáculos. Los formularios para inscribir al bebé por Internet no estaban preparados, y ninguno quería que uno de los tres quedara fuera. Por fin, tras un par de meses, consiguieron solucionar el problema de los papeles.
Ahora, con la niña en casa, “parece lo más natural del mundo, somos como cualquier otra familia”, dice Kangro.
La nueva Ley de Derecho de la Familia de Columbia Británica, que entró en vigor en marzo de 2013, tiene por objeto aclarar quién es un padre y quién no a medida que más parejas recurren a la reproducción asistida.
La ley permite que los donantes sean reconocidos como otros padres, si los padres firman un acuerdo por escrito antes de la concepción.
La abogada que les ayudó en todo el proceso, barbara findlay —quien insiste en escribir su nombre en minúsculas—, define así el cambio social recogido en la nueva regulación canadiense: “En los viejos tiempos, lo que primaban eran las conexiones biológicas y genéticas. Y eso ya no es lo verdadero. Ahora nos centramos en la intención de las partes que contribuyen a engendrar al niño, pero también a criarlo y educarlo. Y ese es un cambio realmente enorme”.
Los padres de Della dicen que han tenido un apoyo abrumador de la familia, los amigos y la comunidad de Vancouver.
Cuentan que siempre hay alguien para tomarla en brazos en una fiesta, y que tiene tres pares de abuelos que la echan a perder.
«Ahora que todo ha terminado y la gente ve que somos una familia, que esto es real, es mucho más fácil de digerir para quien tuviera dudas. »
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