El caso de José Figueroa y su familia ha dado mucho de que hablar luego de que una decisión migratoria los considerara inadmisibles al refugio debido a su condición de simpatizante del FMLN.
La ex guerrilla salvadoreña, actualmente en el poder, fue considerada por las autoridades migratorias canadienses como una organización terrorista.
La saga jurídica y administrativa de esta historia comenzó cuando muchos salvadoreños y abogados canadienses consideraron ambigua, contradictoria y absurda la decisión migratoria debido a que la historia demuestra que Canadá apoyó en la ONU una decisión que reconocía el carácter beligerante del FMLN.
A esto se agrega que el gobierno canadiense mantiene muy buenas relaciones con su homólogo salvadoreño que es del FMLN e incluso ha recibido a funcionarios que hicieron parte de la guerrilla salvadoreña sin considerarlos terroristas.
Martín Movilla habló con José Figueroa –quien se encuentra “en santuario”, es decir refugiado, en una iglesia luterana de la provincia de Columbia Británica- sobre la decisión tomada por el juez federal y las implicaciones que ella tiene en su caso.
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