Tras indignar a los votantes latinos el mes pasado al retrasar las prometidas reformas a la inmigración, se estima que el presidente estadounidense, Barack Obama, tratará de convencer a los legisladores hispanos este jueves de que su compromiso sigue en pie.
Obama, quien en los dos últimos años estuvo ausente de la gala anual realizada por el Congressional Hispanic Caucus Institute, volverá al evento para reiterar su voluntad de llevar adelante una reforma inmigratoria, señaló un funcionario de la Casa Blanca.
El funcionario, quien pidió no ser identificado, dijo que Obama también tiene la intención de usar sus atribuciones presidenciales para llevar adelante posibles cambios en el sistema de inmigración estadounidense.
El voto latino es importante para los demócratas y sus esperanzas de mantenerse en la Casa Blanca en el 2016.
El representante demócrata Luis Gutiérrez de Illinois, un activista destacado a favor de una legislación integral de inmigración, ilustró los difíciles lazos que han tenido los hispanos con Obama en los últimos seis años.
«El presidente de Estados Unidos hizo una promesa en el 2008, durante la campaña, que la cumpliría en el 2009, en el 2010, en el 2011 y en el 2012», dijo Gutiérrez refiriéndose a una actualización de la atrasada ley de inmigración del país.
«Está claro que cualquiera que mira esto dirá: ‘¡Ah!, no éramos la prioridad que deberíamos haber sido y tampoco fuimos la prioridad que él prometió que seríamos'», destacó Gutiérrez.
Los republicanos en la Cámara de Representantes bloquearon la legislación de inmigración aprobada por el Senado en el 2013, y la comunidad latina demandó que Obama cumpla con la promesa de usar su autoridad ejecutiva para flexibilizar las deportaciones de algunos de los casi 12 millones de indocumentados en el país.
Ese es un paso que prometió que tomaría a finales del verano, pero Obama decidió atrasarlo por temor a que pudiera dañar las posibilidades electorales de los demócratas en Estados conservadores en las próximas elecciones legislativas de noviembre.
Pese a la fricción entre los hispanos y Obama, Gutiérrez no se expresó con dureza sobre el presidente demócrata previo a su discurso del jueves.
Mientras Obama dé su discurso en la ceremonia de gala dirigiéndose a los legisladores hispanos, algunas organizaciones latinas protestarán al exterior para demostrar su enojo sobre el retraso en la promesa del presidente.
«La pregunta al presidente Obama es: ¿cómo va a hacer para que los latinos confíen nuevamente en usted?'», dijo Cristina Jiménez, directora de United We Dream, una organización de jóvenes inmigrantes que ha presionado a Obama para frenar las deportaciones.
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