Con el apoyo financiero de Centro Internacional de Investigaciones para el Desarrollo de Canadá, IDRC-CRDI-CIID, se está llevando a cabo en la actualidad un programa para reducir el consumo de sal y sodio en Costa Rica.
Esta iniciativa de salud pública, que pretende disminuir el elevado consumo de sal y sodio en la población para mejorar la salud de los costarricenses, es liderada por el Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud. INCIENSA, de este país centroamericano.

El sodio es indispensable para la salud humana pero en muy pequeñas cantidades. Se necesita alrededor de medio gramo, 500 miligramos, por día y en la actualidad, no solo en Costa Rica, sino en todos los países latinoamericanos se está consumiendo en promedio entre 9 y 12 gramos diarios de sal por persona, 10 gramos en el caso de Costa Rica.
Hay que decir que el máximo recomendado por la Organización Panamericana de la Salud, OPS, y por la Organización Mundial de la Salud, OMS, es de 5 gramos por día. Y este consumo excesivo de sal está afectando no solo la salud de los mayores sino de los menores también.

Según Adriana Blanco Metzler, coordinadora del programa, investigadora y responsable del Laboratorio Tecnología Nutricional, Unidad de Salud y Nutrición de INCIENSA, se está viendo en Costa Rica un aumento de la hipertensión arterial en las personas jóvenes. En niños, ya comienza a aparecer y en los adolescentes está aumentando. En Costa Rica, entre las personas mayores de 20 años y hasta la muerte, el promedio de hipertensión arterial es de 38% de la población.
EscuchePara explorar más a fondo este problema Pablo Gómez Barrios conversó con Adriana Blanco Metzler.
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