Los residentes de Túnez que viven en Canadá se encuentran en estado de choque tras los trágicos eventos que se produjeron en su país, este miércoles.
Según el Embajador de Túnez en Canadá, Riad Essid, un grupo armado intentó introducirse en el parlamento tunecino, en la mañana del miércoles, pero fue rechazado en el estacionamiento adyacente.
Los asaltantes atacaron entonces a los turistas que visitaban el Museo Nacional del Bardo, justo al lado.
El balance más reciente reporta la muerte de 23 personas, entre ellas 18 turistas extranjeros, y al menos 50 heridos. Dos asaltantes murieron bajo las balas de las fuerzas del orden.
“Es realmente triste y chocante ver nuestro país así. Tengo amigos, antiguos colegas, la familia que aún viven en las afueras de la capital. Me preocupa su seguridad”, dijo Sofiani Naghieei, un habitante de Ottawa de origen tunecino.
Riad Essid afirmó que este asunto reavivó los recuerdos dolorosos del tiroteo el 22 de octubre en Ottawa. La embajada de Túnez recibió numerosos mensajes de apoyo, así como llamadas de expatriados preocupados.
“Muchos residentes han expresado sus preocupaciones puesto que es la primera vez que civiles son el blanco de ataques en Túnez. Es realmente lamentable. Nuestra comunidad sigue con mucha preocupación este tipo de incidente que desafortunadamente creíamos que no existía en Túnez”, deplora el Embajador.
Se espera que centenas de tunecinos asistan al Centro Nacional de Artes (CNA), este jueves en la noche, para celebrar la Fiesta de la Independencia de su país. El evento se realizará a pesar de los últimos acontecimientos, pero las festividades serán remplazadas por una ceremonia más sobria.
Según el presidente tunecino, Béji Caïd Essebsi, no hay dudas de que los responsables de este ataque son muyahidines islamistas. Las víctimas son diferentes nacionalidades “poloneses, italianos, alemanes y españoles”, informó Mohamed Ali Aroui, portavoz del Ministerio del Interior.
Túnez es víctima de una emergencia del movimiento de los muyahidines que practican el Yihad, desde la “Revolución del jazmín” de enero de 2011 cuando los tunecinos lograron sacar del poder al ex presidente Zine el-Abidine ben Ali. Varias organizaciones extremistas, como Ansar al-Charia, aparecieron en el contexto de la Revolución.
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.