El presidente de la FIFA, Sepp Blatter, renunció de su cargo. “La FIFA hace frente a desafíos que no se detienen y necesita una profunda restructuración”, declaró Blatter en conferencia de prensa.
Los numerosos escándalos financieros y de corrupción que han salpicado a la institución y que continúan desde hace algunos días convencieron al controvertido presidente.
Blatter acababa de ser reelegido en Zúrich el viernes pasado para un quinto mandato consecutivo a la cabeza de la más grande federación deportiva internacional.
“Aunque se me haya confiado un nuevo mandato, al parecer no cuento con el apoyo de todo el mundo del fútbol. Es por eso que voy a convocar a un congreso extraordinario y poner mi mandato a su disposición”, dijo esta tarde el suizo en la sede de la FIFA en Zúrich. El hombre de 79 años ocupaba el cargo desde 1998.
Este congreso debería realizarse entre diciembre de 2015 y marzo de 2016, precisó Domenico Scala, presidente de la Comisión de auditoría de la FIFA.
“Voy a continuar ejerciendo mis funciones hasta ese momento y desde ahora estoy libre de las obligaciones de la elección. Voy a concentrarme en el comienzo de una reformas ambiciosas”, agregó el presidente renunciante de la FIFA.
Esta renuncia ocurre pocas horas después que el diario New York Times hubiera presentado nuevas acusaciones, esta vez contra el francés Jerome Valcke, Secretario general de la organización y brazo derecho de Blatter.
El diario estadounidense acusa a Valcke de ser el responsable de un pago de 10 millones dólares a cuentas administradas por el ex vicepresidente de la FIFA, Jack Warner, acusado por la justicia estadounidense de estar implicado en un escándalo de corrupción.
La FIFA había intentado esta mañana de restar importancia a estas acusaciones.
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