El gobierno de Chile está evaluando, seriamente, la posibilidad de levantar el secreto que se impuso –de 50 años- sobre un documento conocido con el nombre de Informe Valech que habla de la prisión política y de la tortura.
La administración de la presidenta Michelle Bachelet está analizando las solicitudes realizadas por las víctimas de las violaciones de Derechos Humanos durante la dictadura, dirigentes políticos y organizaciones nacionales e internacionales de defensa de los derechos fundamentales.
Marcelo Díaz, ministro vocero del gobierno, aseguró que se están evaluando todas las consideraciones que rodean el tema para poder tomar una decisión definitiva.
El gobierno tiene claro que el carácter secreto del informe es algo normal debido a que eso facilitó y permitió que mucha gente entregara más información fundamental para su elaboración.
Hace unos días, cuando un ex militar salió ante la opinión pública para revelar detalles de un famoso caso de tortura –en el que dos jóvenes fueron brutalmente quemados por militares- la opinión chilena se dio cuenta de que persisten los “pactos de silencio” que impiden conocer la verdad sobre muchas cosas sucedidas durante la dictadura.
Una de las informaciones principales consignadas en el reporte tiene que ver con los nombres de los torturadores y violadores de Derechos Humanos. Las víctimas dicen que hay que hacer sus públicos sus nombres para que sean juzgados.
Michelle Bachelet, ella misma víctima de la dictadura, dará pronto una respuesta definitiva sobre si se conserva o se levanta el secreto del Informe Valech.
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