Un informe confidencial al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas presentado el viernes pasado acusa a Ruanda de proporcionar entrenamiento, financiación y apoyo logístico hasta inicios de 2016 a los rebeldes de Burundi que intentan derrocar al presidente de Burundi, Pierre Nkurunziza.
Un grupo de seis expertos independientes, designados por las Naciones Unidas para supervisar las sanciones del Consejo de Seguridad sobre la República Democrática del Congo, había informado de forma confidencial en febrero pasado que 18 combatientes de Burundi en el este del Congo dijeron que habían sido reclutados en un campo de refugiados en Ruanda a mediados de 2015 y entrenados por instructores, entre ellos, personal militar de Ruanda. Ruanda ha negado en repetidas ocasiones las acusaciones.
En ese informe en febrero, los expertos estimaron que unos 400 refugiados burundeses en Congo fueron reclutados el año pasado y entrenados por personal militar de Ruanda en tácticas militares, manejo de armas ligeras como rifles de asalto y ametralladoras, así como lanzagranadas y morteros, entre otras armas, con el objetivo de derrocar a Nkurunziza.
«Un apoyo similar continuó durante 2016», indicó el nuevo informe. «Cobró la forma de instrucción, financiación y apoyo logístico para combatientes burundeses que cruzan desde Ruanda» a Congo.
Los expertos dijeron haberse entrevistado con ruandeses que les dijeron haber participado en la instrucción de combatientes burundeses o que se los había enviado a Congo para ayudar a respaldar a la oposición burundesa.
Burundi está sumida en la violencia desde abril de 2015, cuando Nkurunziza anunció que se presentaría a un tercer mandato que ganó en julio, pese a las protestas de que incumple la constitución.
Más de 400 personas han muerto y el brote de violencia que incluyó torturas y un aumento de las desapariciones, ha creado un clima de temor y llevado a más de 250.000 personas a huir a países vecinos.
Los expertos de la ONU dijeron que habían presentado sus conclusiones al gobierno de Ruanda «, que negó cualquier implicación, señalando que no » tenía conocimiento del reclutamiento de refugiados de Burundi en el campo de refugiados Mahama”. ‘
La ONU tiene una misión de paz de 20.000 efectivos en el Congo, la mayoría en la zona este.
Armas norcoreanas al Congo
Los expertos de la ONU también informaron de que oficiales del ejército y la policía congoleña recibieron pistolas de un grupo de 30 instructores norcoreanos que entrenaron a su guardia presidencial y fuerzas especiales de la policía, lo que violaría las sanciones de la ONU que prohíben la exportación de armas o la prestación de instrucción militar por parte de Pyongyang.
El comité de expertos que supervisa las sanciones de Naciones Unidas contra Congo dijo haber descubierto la entrega de pistolas similares a las fabricadas en Corea del Norte a algunos miembros del ejército y la policía nacional congoleña que sirven en la misión de paz de Naciones Unidas.
«El grupo también encontró que ese mismo tipo de pistola estaba disponible a la venta en el mercado negro de Kinshasa», la capital congoleña, según indicó el comité en extractos de su informe presentado el viernes ante la ONU.
Finalmente los expertos dijeron que habían pedido información a Pyongyang y al Congo, pero que aún no han recibido una respuesta.
RCI con información de Reuters/Internet
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