El único rehén canadiense vivo en el sur de Filipinas ha aparecido en un nuevo video, anunciando que sus captores lo decapitarán a él y a otro rehén noruego el próximo mes si no reciben 16 millones de dólares como rescate, según lo informa el periódico canadiense National Post.
Robert Hall, con aspecto demacrado y flaco, dice que va a ser ejecutado el 13 de junio a las 3 pm si no se cumplen las demandas del grupo extremista musulmán Abu Sayyaf.
«Apelo a mi gobierno y al gobierno de Filipinas, como he apelado antes, en busca de ayuda», dice con una voz tranquila, pero monótona y con extremistas armados y enmascarados de pie detrás de él.
Un texto en inglés con el vídeo especifica que un rehén será decapitado si no se paga el rescate.
El video fue publicado por los yihadistas el 13 de mayo y descubierto el domingo por el Site Intelligence Group, unas tres semanas después de que Abu Sayyaf asesinó a John Ridsdel, otro canadiense capturado al mismo tiempo que Hall.
Rachna Mishra, una portavoz de Asuntos Globales de Canadá, dijo que el departamento está al tanto del video, pero que no va a hablar públicamente sobre el tema.
«La primera prioridad del Gobierno es la protección y la seguridad de sus ciudadanos, por lo tanto no vamos a comentar o divulgar cualquier información que pueda comprometer los esfuerzos en curso o poner en peligro la seguridad de los rehenes restantes», dijo en un correo electrónico.
A raíz del asesinato de Ridsdel, el primer ministro Justin Trudeau dijo claramante que el gobierno no paga rescates de rehenes. Pero ex funcionarios del gobierno han dicho, sin embargo, que más allá de las declaraciones oficiales, el gobierno considerará casi cualquier cosa en sus esfuerzos por liberar a los cautivos canadienses.
El nuevo video termina con una declaración de uno de los terroristas enmascarados, su voz aumentando de manera constante hasta llegar a un crescendo enojado, antes de empuñar un machete en el aire en medio de un coro de «Alahu Ajbar» – en árabe, Dios es grande.
«Decimos a los gobiernos de Canadá y de Filipinas de no jugar juegos, porque estamos decididos a matar a todos los cautivos si no cumplen con nuestras demandas», dice el hombre, leyendo de la pantalla del teléfono. «No les tenemos miedo, ni a usted ni sus soldados ni aviones.»
Tanto Hall y el noruego Kjartan Sekkingstad están vestidos de naranja, similar a los rehenes en videos producidos por el Estado Islámico de Irak y el Levante, al que Abu Sayaff ha prometido lealtad.
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.