Tommie Smith y John Carlos, cabezas bajas y puños levantados / © Tim Dahlberg, AP

Tommie Smith y John Carlos, cabezas bajas y puños levantados / © Tim Dahlberg, AP
Photo Credit: Tim Dahlberg, AP

Barack Obama recibirá a Smith y Carlos, símbolos de la lucha por los derechos cívicos en EE UU

Los mayores de 50 años recordarán probablemente a Tommie Smith y John Carlos, dos atletas afro-estadounidenses excluidos de los Juegos Olímpicos de México en 1968 por haber levantado el puño con un guante negro después de la entrega de medallas en los 200 metros. Cuarenta y ocho años más tarde, los dos hombres serán recibidos por el presidente Barack Obama en la Casa Blanca. Esta es una forma de rehabilitación que los defensores de los derechos cívicos esperan desde hace tiempo.

Los dos ex atletas fueron invitados por el Comité Olímpico Estadounidense a una cena de gala organizada el miércoles en Washington en honor de la delegación de los Juegos de Río, que ellos acompañarán al día siguiente para un encuentro con el presidente Barack Obama.

La foto de Smith y Carlos, medallistas de oro y bronce respectivamente en los 200 metros en los Juegos Olímpicos de México, la cabeza baja y el puño enguantado de negro levantado en el podio mientras se escuchaba el himno estadounidense, se convirtió en un símbolo de la lucha por la equidad racial en Estados Unidos.

Tommie Smith gana la final de los 200 m en los Juegos Olímpicos de México en 1968.
Tommie Smith gana la final de los 200 m en los Juegos Olímpicos de México en 1968. © Getty Images/Douglas Miller

Su ejemplo ha sido seguido varias veces en las últimas semanas por jugadores de fútbol norteamericano de la NFL, que se niegan a quedarse de pie y ponen una rodilla a tierra para denunciar la serie de errores policiales mortales contra negros en Estados Unidos.

En aquella época, Smith y Carlos pagaron caro su gesto y osadía, no solo frente al Comité Olímpico, que los suspendió del equipo nacional y los envió de regreso a Estados Unidos, sino también frente a la opinión pública estadounidense.

El puño levantado fue interpretado como un saludo del Black Power (Poder Negro), pero los atletas dijeron después que sí se trataba de un saludo pero a los derechos humanos.

El ex atleta, que hoy tiene 71 años, dice que no esperaba, ni deseaba excusas de parte del Comité Olímpico, porque su gesto contravenía claramente al reglamento. Pero estima muy humildemente, que con el tiempo los responsables olímpicos estadounidenses habían comprendido mejor las razones de su gesto.

Radio Canadá/Reuters

Categorías: Sin categoría
Etiquetas: , , , ,

¿Encontró un error? ¡Pulse aquí!

Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.