Stephen Bannon, el gurú de la llamada derecha alternativa estadounidense, fue nombrado estratega principal en la Casa Blanca y asesor de alto nivel en el próximo gobierno de Donald J. Trump.

Stephen Bannon, el gurú de la llamada derecha alternativa estadounidense, fue nombrado estratega principal en la Casa Blanca y asesor de alto nivel en el próximo gobierno de Donald J. Trump.
Photo Credit: Carlo Allegri / Reuters

El mensajero del odio racial llega a la Casa Blanca

Escuche

La elección del candidato republicano Donald Trump a la presidencia estadounidense continúa causando reacciones en la prensa canadiense. Un reciente editorial del periódico Toronto Star señala como un signo de mal augurio el nombramiento de Stephen Bannon como estratega del próximo gobierno de Estados Unidos.

Según el Toronto Star, el nombramiento del gurú de la llamada derecha alternativa estadounidense, Stephen Bannon, como jefe de la Casa Blanca envía una señal clara de que el discurso del odio hará parte de la agenda del gobierno de Trump.

El nombramiento de Stephen Bannon, un ex director ejecutivo de la Red de Noticias Breitbart, como estratega principal en la Casa Blanca y asesor de alto nivel en el próximo gobierno de Donald J. Trump es un regalo para unos y una amenaza aterradora para otros.

David Duke, un ex “mago imperial” de la organización racista Ku Klux Klan, hizo conocer su satisfacción con ese nombramiento. Duke dijo que Bannon es una «excelente» opción. El presidente del Partido Nazi Estadounidense dijo que la presencia de un ideólogo de extrema derecha en el seno de la presidencia muestra que Trump es “creíble”. Tanto los nacionalistas blancos como los neonazis en Estados Unidos están de fiestas.

Miembros del Ku Klux Klan y supremacistas blancos en Carolina del Sur.
Miembros del Ku Klux Klan y supremacistas blancos en Carolina del Sur. © CHRIS KEANE / Reuters

Para Bannon, que dirigía la campaña de Trump, el apoyo de esos grupos no es extraño. A la cabeza de la red de noticias de extrema derecha Breitbart, él supervisó la publicación del medio más importante de la derecha alternativa, una red compuesta en su mayoría por hombres blancos que rechazan los derechos civiles y se sienten oprimidos por los avances realizados en las últimas décadas por las mujeres, la gente de otros colores y por la comunidad lesbiana, homosexual y transgénero.

Los miembros de esta derecha alternativa promueven la supremacía blanca y la misoginia, acosan a la gente de color y a las mujeres en los rincones más oscuros del Internet. Y pocas esquinas son tan oscuras como el sitio web de Bannon, llamado Breitbart News. Es un sitio infame, habitado por personas que se alimentan de ignorancia, desinformación y odio.

Ahora, Stephen Bannon, el diseminador de la intolerancia, el hombre que ha incitado a los republicanos a «funcionar en base al odio», que ha sido condenado por sus opiniones antisemitas, el que ha insinuado que los afroamericanos son «agresivos y violentos por naturaleza», el que ha sido acusado de múltiples actos de violencia familiar, este personaje ejercerá una enorme influencia en la Casa Blanca.

Para aquellos que querían creerle a Donald Trump cuando dijo que sería el presidente de todos los estadounidenses, el nombramiento de Bannon es un golpe terrible. Su nominación es una aprobación tácita de la retórica de odio racial que ayudó a Trump a llegar a la Casa Blanca. Se trata de una retórica que ha contribuido a un aumento de los crímenes y el acoso por motivos raciales desde la noche misma en que se anunciaron los resultados de la elección.

Cartel durante una manifestación contra Trump en Ottawa
Cartel durante una manifestación contra Trump en Ottawa © Radio-Canada

El mensaje que envía Trump con el nombramiento de Stephen Bannon también tendrá consecuencias fuera de Estados Unidos. La fanática intolerancia desatada por su campaña no conoce fronteras. Varios carteles aparecieron en las calles de Toronto pidiendo a la gente de raza blanca, «harta de ser culpada de todos los problemas del mundo», a unirse al movimiento de la derecha alternativa. El pasado lunes, un rabino de Ottawa descubrió insultos antisemitas y una esvástica pintada en su puerta. En otra zona de Toronto, una escuela fue vandalizada con grafitis que mostraban la insignia nazi y las letras «KKK», signo de la organización racista Ku Klux Klan.

«La gente que promueve la supremacía de la raza blanca se ha envalentonado”, dijo Marilyn Mayo, una investigadora en el Centro de la Liga Anti-Difamación sobre el extremismo. «Ellos sienten que ese movimiento ha sido aceptado y que se está convirtiendo en un discurso normal en la sociedad.»

Donald Trump, elegido a la presidencia estadounidense.
Donald Trump, elegido a la presidencia estadounidense. © CP

Ese es el peligroso resultado de la campaña de Donald Trump, que desató y legitimó en Estados Unidos el racismo, la misoginia, la homofobia y el antisemitismo y, en cierta medida, también lo legitimó en Canadá.

Al ofrecerle a Stephen Bannon un puesto destacado en su administración, el presidente electo Donald Trump ha enviado una clara señal de que el discurso del odio se mantendrá en el orden del día del nuevo gobierno de Estados Unidos. Para la derecha alternativa, esto es un sueño hecho realidad. Para el resto de la población, es una pesadilla, dice finalmente el editorial del periódico canadiense Toronto Star.

Categorías: Internacional, Política
Etiquetas: , , , , , ,

¿Encontró un error? ¡Pulse aquí!

Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.