Los médicos del Hospital General de Toronto llevaron a cabo lo que se cree que es una primicia mundial el pasado mes de abril.
Ellos informaron que fueron capaces de salvar la vida de una mujer de 32 años de la localidad de Burlington mediante la extirpación de sus dos pulmones, utilizando para ello una tecnología de última generación para mantenerla viva durante los seis días que hubo que esperar hasta que órganos donados sean disponibles para llevar a cabo un trasplante de pulmones.
Melissa Benoit nació con fibrosis quística y había desarrollado una infección pulmonar resistente a los antibióticos que luego se extendió por todo el cuerpo.
Fue en estas circunstancias que los médicos del Hospital General de Toronto presentaron la idea del procedimiento como último recurso para salvarle la vida, a lo cual su familia aceptó inmediatamente.
El informe del trabajo de este equipo de médicos fue publicado en la última edición de la Revista de Cirugía Torácica y Cardiovascular.
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