Ya sea que tengamos relaciones sexuales o no, si somos asexuales o nos identificamos como lesbianas, queers, heterosexuales o si somos transexuales, la sexualidad es una parte fundamental del ser humano. Y creo que es chocante el grado de ignorancia que tenemos sobre cómo estos componentes hacen que nuestra respuesta sexual funcione.
–Meredith Chivers, Queen’s University
Investigadores canadienses e internacionales dicen que cuando se trata de entender lo que excita sexualmente a las mujeres aun hoy hay muchas más preguntas que respuestas. Meredith Chivers está trabajando para encontrar esas respuestas. Ella es una investigadora sexual canadiense que ha ganado reconocimiento internacional por su trabajo en derrumbar prejuicios y suposiciones sobre el deseo sexual femenino. Meredith Chivers es profesora asociada en el Departamento de Psicología de la Universidad de Queens, Ontario.
Un estudio liderado por canadienses ha descubierto que las mentes y los cuerpos de los hombres están más sincronizados que los de las mujeres cuando se trata de excitación sexual.
El análisis de investigaciones previas sobre la sexualidad humana encontró que los sentimientos de excitación de los hombres tienden a coincidir con sus respuestas fisiológicas, mientras que las respuestas de la mente y el cuerpo de las mujeres eran más a menudo inconsistentes.
La profesora de psicología Meredith Chivers, de la Queen’s University, dirigió el estudio, que incluyó a investigadores del Royal Ottawa Health Care Group, la Universidad de Lethbridge, en Alberta, el Instituto de Ontario para Estudios en Educación de la Universidad de Toronto y la Universidad de Amsterdam.
«Queríamos descubrir cómo la experiencia subjetiva de la excitación sexual de la gente refleja su respuesta genital fisiológica – y si esto difiere entre hombres y mujeres», dijo Chivers.
Los investigadores compararon los sentimientos de los participantes con sus respuestas fisiológicas: cambios en la erección de los hombres y en el flujo de sangre genital en las mujeres.
Los grados subjetivos de los hombres de su estado de excitación coincidían más estrechamente con las respuestas de sus cuerpos que con las de las mujeres. El análisis de las respuestas de las mujeres sugirió una división entre sus cuerpos y mentes.
«Nuestros resultados tienen implicaciones para la evaluación de la excitación sexual, la naturaleza de las diferencias de género en la excitación sexual y los modelos de respuesta sexual», escribieron los investigadores en su estudio, publicado en la revista Archives of Sexual Behavior.
Los misterios del deseo femenino
El deseo sexual femenino a menudo ha sido y sigue siendo mal comprendido. «Esperamos siempre que la sexualidad de las mujeres se comporte como la de los hombres», le dijo Chivers a Anna Maria Tremonti, del programa The Current, de CBC.
«Y mientras más investigación hago con mi equipo aquí en Kingston y mis colaboradores de todo el mundo, más nos damos cuenta de que no lo es».
«Los modelos de sexualidad masculina que han predominado durante décadas no encajan y necesitamos de la ciencia para entender cómo la sexualidad de las mujeres es única».
La directora del laboratorio de sexualidad y género de la Queen’s University ha ganado reconocimiento internacional por sus estudios revelando algunos de los misterios del deseo.
La investigación de Chivers abarca todo, desde la excitación y la orientación sexual de las mujeres, hasta el consentimiento y las dificultades sexuales.
Una de las principales conclusiones de su investigación es que las mujeres heterosexuales -que informan que sólo las atraen los hombres- tienen respuestas sexuales cuando están expuestas tanto a imágenes sexuales de hombres como de mujeres.
“Hemos visto que las mujeres que reportan atracción exclusiva sexual hacia los hombres muestran respuestas sexuales bastante significativas tanto frente a estímulos sexuales masculinos como femeninos. Y ese efecto parece ser bastante único para las mujeres que afirman que son excitadas exclusivamente por los hombres. Así que es un poco un rompecabezas que no se corresponde con lo que están respondiendo sobre sus atracciones sexuales. Y a medida que profundizamos el tema parece que hay más diferenciación en sus respuestas sexuales, más hacia los estímulos sexuales femeninos que a los masculinos”.
Chivers le dice a Tremonti que tiene un par de hipótesis acerca de por qué eso podría ser. En primer lugar, dice, la psicología sexual de las mujeres heterosexuales puede verse influenciada, moldeada por la visión de tantas imágenes hipersexualizadas de mujeres.
«Tal vez eso tiene la capacidad de cambiar su aptitud de sentirse atraída por las mujeres», dice.
El placer para las mujeres heterosexuales
La otra hipótesis por la que las mujeres heterosexuales se sienten excitadas por imágenes de mujeres es que el sexo heterosexual puede no ser tan gratificante para ellas.
Chivers dice que es bien sabido que las mujeres heterosexuales son menos propensas a experimentar el placer sexual y el orgasmo durante el sexo con penetración con los hombres.
Ella cree que hay modelos de respuesta sexual que pueden estar emergiendo porque no ha habido mucho refuerzo o gratificación del sexo, para las mujeres heterosexuales.
“Pero si nos fijamos en las mujeres queer y sus relaciones sexuales hay un porcentaje abrumadoramente mayor de mujeres que dicen, por supuesto, cuando estoy teniendo sexo con mi novia estoy experimentando placer sexual y un orgasmo. Pero para las mujeres heterosexuales, ese refuerzo o esa recompensa podría ser menos predecible”.
Las mujeres queer han tenido más y más experiencias de atracción y de sexo con mujeres, que forman parejas por el placer. Y esto podría condicionar sus respuestas sexuales hacia la estimulación femenina, mucho más fuertes, que para las mujeres exclusivamente heterosexuales”.
Los estudios de Chivers también han demostrado que los cuerpos de las mujeres pueden mostrar signos de respuesta sexual cuando están expuestos a imágenes ilógicas – incluyendo sexo no consentido e incluso videos de monos bonobos- que tienen relaciones sexuales.
«Simplemente ver actividad sexual fue suficiente para activar los sistemas de respuesta sexual de las mujeres».
Las respuestas físicas del cuerpo femenino
Y los resultados de la investigación han sido reconfortantes para algunas sobrevivientes de agresión sexual que colaboraron en la investigación de Chivers. Ella dice que algunas reportaron experimentar síntomas de excitación sexual – como lubricación y aumento del flujo sanguíneo a los genitales durante una violación – y que estaban preocupadas por eso.
Pero Chivers dice que esas respuestas físicas no son en modo alguno una señal de consentimiento a una agresión. Puede ser similar a alguien que saliva a la vista de la comida, incluso si no tiene hambre.
«Tal vez lo que está ocurriendo físicamente es una forma muy automática de respuesta que prepara el cuerpo físico de las mujeres para el sexo, ya sea que se quiera o no», sugiere.
«Varias mujeres se acercaran a mí y me expresaron su gratitud al reformular esta idea de que no era su cuerpo quien las traicionaba, sino que era su cuerpo el que las protegía».
La periodista de CBC le dijo que hay gente que considera que ese tipo de investigación sobre sexualidad es algo frívolo.
¿”Cómo responde a eso”?
MEREDITH CHIVERS: Bueno, están equivocados. La sexualidad es una parte fundamental del ser humano. Y siempre me sorprende lo poco que sabemos, dada la importancia de nuestras sexualidades. Ya sea que tengamos relaciones sexuales o no, si somos asexuales o nos identificamos como lesbianas, queers, heterosexuales o si somos transexuales, lo que sea, es una parte fundamental de ser humano. Y creo que es chocante el grado de ignorancia que tenemos de cómo estos componentes hacen que nuestra respuesta sexual funcione.
RCI/CBC/The Current
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