El premio Nobel de la Paz 2017 fue otorgado a la organización Campaña Internacional para Abolir las Armas Nucleares, anunció el viernes 6 de octubre la academia noruega encargada del galardón.
“Es un momento de gran tensión en el mundo, cuando las declaraciones altisonantes podrían conducirnos muy fácilmente a todos, inexorablemente, hacia un horror sin nombre”, sostuvo la entidad premiada por medio de un comunicado. El texto difundido por la CIAN agregó que “si hubiera un momento para que las naciones expresen su oposición sin ambages contra las armas nucleares, ese momento es ahora”.
El comité Nobel decidió premiar los esfuerzos antinucleares en momentos en que el presidente estadounidense, Donald Trump, amenaza con anular el acuerdo logrado con Irán en 2015 para evitar la proliferación de armas atómicas, al tiempo que se halla inmerso en una disputa con su par norcoreano, Kim Jong-un, en la que ambos líderes se lanzan intimidaciones, amenazando con utilizar arsenal atómico para destruirse mutuamente.
Setenta y dos años después de los ataque con bombas atómicas contra Hiroshima y Nagasaki, 122 países firmaron en julio, con el aval de Naciones Unidas, un tratado que postula por primera vez la prohibición de desarrollar, almacenar o amenazar con utilizar armas nucleares.
El alcance de ese pacto sigue siendo simbólico, al menos por el momento, debido a que las potencias nucleares rechazaron adherir al mismo. La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), de la que Noruega forma parte, condenó el acuerdo, invocando principalmente la grave amenaza que constituye el gobierno norcoreano.
Los diplomáticos se inquietan de las repercusiones negativas de un giro total estadounidense en el tema, cuando la comunidad internacional espera retornar a Corea del Norte a la mesa de negociaciones, para hacerle reconocer sus propias ambiciones nucleares.
El sexto ensayo nuclear norcoreano, el 3 de septiembre, y las pruebas con lanzamientos de misiles fueron seguidos de insultos, amenazas y demostraciones de fuerza tanto de la parte de Pyongyang como de Washington.
Con su decisión, el comité del Nobel de la Paz buscó “lanzar una señal a Corea del Norte y Estados Unidos, en el sentido de que necesitan iniciar negociaciones”.
Por su parte, la jefa de la diplomacia de la Unión Europea, Federica Mogherini, saludó la atribución del premio Nobel de la Paz a la entidad antinuclear, diciendo que su objetivo de conseguir un mundo sin armas atómicas es compartido por todos los países del bloque.
La Campaña Internacional para la Abolir las Armas Nucleares reagrupa a un centenar de entidades no gubernamentales.
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