Si la gente pensara en ayudar, y no solo en sí misma, el mundo andaría mucho mejor.
– Marien Landry, Proyecto Guatemala
Aunque la vida transcurriera sin problemas, sin dolor, penas ni decepción, aunque pudiéramos tener todo lo que quisiéramos, probablemente seguiríamos buscando en nuestras almas darle un sentido a nuestras vidas. Una razón para nuestra existencia. Algunos le llaman a eso la búsqueda de la conexión humana. Otros se refieren a personas imprescindibles. Marien Landry es una de ellas.
EscucheAunque ya es un jubilado desde 2008 de la metalúrgica ArcelorMittal, hablar con Marien Landry es descubrir su entusiasmo contagioso por la vida que solo prácticamente lo conservan los niños.
Marien Landry, viene de Gaspésie, provincia de Quebec. Se instaló en Montreal hace un cuarto de siglo.
Pero en lugar de disfrutar de la vida de jubilado e irse a tomar sol a las playas del sur durante los inviernos polares, como muchos de los jubilados canadienses, él decidió que su objetivo no era convertirse en un turista humanitario sino en un trabajador humanitario.
En esa búsqueda, recorrió países como Perú, Bolivia, Paraguay y Brasil, pero su corazón se detuvo en Guatemala.
Allí vio lo que creyó que era un gallinero. ¡Pero era una escuela! Eso le cambió la vida a él y a los niños del lugar.
Regresó al año siguiente, sin hablar todavía español, con $ 12,500 que recaudó para construir una escuela digna de ese nombre «con tres clases, una oficina para la dirección y baños».
Hace casi un decenio que vive 6 meses en Canadá y 6 meses en Guatemala. En ese período ya construyó 12 escuelas. El sindicato de metalúrgicos colaboró inicialmente en la recaudación de fondos, también amigos y la familia.
Hoy Marien tiene en sus manos más de un centenar de proyectos que espera llevarlos a cabo antes de morir.
Su prioridad son las escuelas aunque también los centros de salud. Entre ellos, Lufe Cadis, que es una organización que ayuda a los niños con discapacidades de Guatemala, «niños con necesidades especiales», dice Marien Landry.
Tan pronto como regresa a Montreal en abril, comienza a recaudar fondos nuevamente para los proyectos del próximo año, organizando paseos en bicicleta y dando conferencias, entre otros.
«Trabajo mucho más que cuando estaba en la fábrica, pero es gratificante. Mi cuenta bancaria está bajando, pero mi riqueza está creciendo”.
La comunidad de San Luis, en el departamento del Petén en Guatemala se arremanga también junto a Marien trabajando en la construcción de escuelas.
El presente y el futuro
Cuando le preguntamos si tiene otros sueños en mente, es categórico: la comunidad es su familia. Sus proyectos se desarrollarán hoy y mañana solo en Guatemala.
La comida
El primer año no podía con las tortillas ni los frijoles. Hoy, cuando regresa a Montreal, extraña esos alimentos. Ya no puede pasarse de ellos.
Lo que extraña de Canadá cuando está en Guatemala
A sus padres y hermanos. Pero ¿si tuviera que elegir donde terminar sus días? ¡Guatemala!
Marien cuenta lo complicado que es tratar de llevar contenedores con elementos muy útiles para las comunidades en Guatemala, y no solo por el costo.
Para los que quieran mayor información sobre Proyecto Guatemala, ver aquí.
Esto y mucho más en la entrevista de Marien Landry, trabajador humanitario en Guatemala, con Radio Canadá Internacional.
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.