Después de cinco días de negociaciones, el gobierno de Nicaragua y la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, anunciaron anoche haberse puesto de acuerdo sobre una “hoja de ruta” de 16 puntos para negociaciones destinadas a salir de la grave crisis política en la que se encuentra sumergido el país desde el mes de abril pasado.
“La hoja de ruta está aprobada”, declaró Waldemar Stanislaw Sommertag, Nuncio apostólico en Managua, que jugará el papel de “testigo y acompañante internacional”, según el acuerdo concluido después de 5 días de reuniones. Las futuras negociaciones se desarrollarán en presencia de representantes de la iglesia católica y protestante.
Carlos Tunnermann y Azalea Solis, miembros de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia de Nicaragua. (Foto: MAYNOR VALENZUELA/AFP/Getty Images)
Un punto que resalta la hoja de ruta, acordada por consenso, es la invitación a tres testigos y acompañantes nacionales e internacionales. Entre los nacionales están el cardenal Leopoldo Brenes, presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, CEN, quien podrá llevar 2 asesores. También se le cursó una invitación al Pastor evangélico Ulises Rivera, coordinador de Pastores Interdenominacionales Unidos por la Nación, también tendría 2 asesores. Y como testigo y acompañante internacional queda el Nuncio Waldemar Stanislaw Sommertag, quien estará acompañado por el Secretario de la Nunciatura Apostólica, Andrea Picconi.
Las delegaciones que se reunirán de lunes a viernes, tienen por objetivo de concluir sus negociaciones el 28 de marzo próximo. Sin embargo, esta fecha límite podrá ser extendida “por consenso” entre las dos delegaciones, compuestas por 6 miembros.
Alex Vanegas, maratonista nicarguense encarcelado como opositor al gobierno, fue liberado el 27 de febrero 2019. (Foto: INTI OCON/AFP/Getty Images)
Pocas horas antes de la reanudación del diálogo el miércoles de la semana pasada, a 100 de los opositores encarcelados se les asignaron sus casas como prisión domiciliaria. Sin embargo, ningún líder importante de la oposición se benefició con esta esta medida. Más de 600 opositores siguen encarcelados, según las organizaciones de defensa de los derechos humanos.
La crisis política en Nicaragua comenzó el 18 de abril de 2017 por manifestaciones contra el gobierno de Daniel Ortega de 73 años, quien denuncia una tentativa de golpe de estado por la oposición con el apoyo de la iglesia y de Washington.
Los opositores, que lo acusan de haber instaurado una dictadura, reclaman su renuncia y la de la vicepresidente, Rosario Murillo, su esposa. Ellos piden también reformas políticas y la convocación a nuevas elecciones antes 2021.
RCI/AFP/elnuevodiario.com/Internet
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