Argentina inicia un proceso político con la asunción de un nuevo gobierno, compuesto por Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner.
El recambio pone fin a 4 años de administración del millonario empresario neoliberal Mauricio Macri, que sumergió al país en una crisis económica que algunos analistas califican como una de las peores que haya vivido esa nación sudamericana.
La fórmula de los Fernández, que representa al kirchnerismo, una de las corrientes internas que componen el peronismo, resultó electa en los comicios presidenciales llevados a cabo el 27 de octubre último, al obtener el 48 por ciento de los votos.
Tras la asunción, la jornada será seguida con un extenso festival artístico. REUTERS/Ricardo Moraes.
Macri, que llegó al poder hace 4 años, con la promesa de impulsar la economía argentina y denunciando la presunta corrupción del gobierno de Cristina Fernández, su antecesora, deja el gobierno con una inflación del 53,5 por ciento anual, según cifras de octubre de este año, una tasa de desocupación que supera el 10 por ciento, y un profundo endeudamiento externo, que alcanza los 280.000 millones de dólares.
Durante los últimos 4 años, numerosas entidades y analistas denunciaron un proceso de retroceso de las condiciones de vida de una importante franja de la población, que ha visto su poder adquisitivo reducirse progresivamente como resultado de la creciente suba de precios y tarifas de los servicios.
La nueva administración llega a la Casa Rosada, sede del gobierno argentino, frente a la histórica Plaza de Mayo, no sólo con la dura tarea de revertir la situación económica que deja Macri, sino en el marco de un proceso de inestabilidad política y giro hacia la derecha en la región, agitada por las protestas en Chile y en Colombia, principalmente, pero también por el golpe de Estado perpetrado en Bolivia contra el presidente Evo Morales.
Algunos simpatizantes optaron por pasar la noche en la Plaza de Mayo. REUTERS/Ricardo Moraes.
El mandatario entrante argentino ya adelantó que no reconocerá a Jeanine Añez como jefa del gobierno de Bolivia, y que esperará la realización de nuevas elecciones para pronunciarse en ese sentido.
Fernández confirmó su gabinete el jueves de la semana última, en el que sobresalen la formación y experiencia de varios de sus miembros.
La cartera de Economía estará a cargo de Martín Guzmán, quien se venía desempeñando como investigador asociado en la Universidad de Columbia, en Estados Unidos, y donde destacó como colaborador estrecho del Premio Nobel Joseph Stiglitz.
Por su parte, Cristina Fernández, en su rol de vicepresidenta, se desempeñará como titular del Senado, un recinto clave para aprobar las leyes que prevé instrumentar la nueva administración, que ya cuenta con quórum propio en la Cámara de Diputados.
Con datos estadísticos del INDEC (Instituto Nacional de Estadísticas y Censo – Argentina).
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