Canadá no ha comenzado aún la evacuación de sus ciudadanos del territorio afectado por el brote de coronavirus en China.
Según dieron a entender las autoridades de Ottawa, el país espera aún obtener el visto bueno del gobierno chino para repatriar a los canadienses que se encuentran en la nación asiática.
En los últimos días se produjo un intercambio de opiniones, en diversos países que esperan poder socorrer a sus ciudadanos, en torno a la necesidad o no de someter a esas personas a una cuarentena, antes de permitirles entrar en contacto con el resto de la población.
Numerosoas ciudades chinas presentan un panorama desolador, por el brote. Foto: iStock.
Por lo que pudo saberse hasta ahora, en el caso de los canadienses, que serán transportados por un avión que ya se encuentra disponible y que aterrizará en una base militar en Trenton, Ontario, estos serán sometidos a un análisis riguroso de detección y a un período de observación, durante el que se procederá a las pruebas necesarias para descartar toda posibilidad de contagio.
A excepción de las personas que tras los análisis necesiten un tratamiento médico, el resto del contingente deberá permanecer en las instalaciones de la base militar por un plazo de 14 días, durante el cual serán sometidos a pruebas y evaluaciones médicas complementarias.
Previamente, con el fin de preservar la salud de todas las personas, los canadienses que deban ser embarcados para su repatriación serán objeto de pruebas sanitarias detalladas antes de subir al avión, durante el vuelo y una vez llegados a Trenton.
Hasta el momento, las personas que expresaron su deseo de ser trasladadas se eleva a 325, según datos con los que cuenta el ministerio canadiense de Relaciones Exteriores.
El mismo organismo precisó que los responsables del gobierno en Ottawa están en contacto con sus pares chinos y con otras autoridades internacionales para hacer un seguimiento estrecho de la evolución de la situación.
Un hospital que se construyó en 8 días para tratar a los contagiados. China Daily via REUTERS.
Ottawa reiteró que sólo resta completar el proceso de autorización por parte de Pekín para que la nave, tras una escala en Hanoi, Vietnam, pueda recoger a los canadienses y sacarlos de la provincia china de Hubei, sin que hasta el momento se haya establecido una fecha precisa para el operativo.
La capital de esa provincia, Wuhan, es considerada el epicentro del brote de la enfermedad, que habría comenzado por fallas en las medidas sanitarias y de higiene en un mercado, en el que se sacrifican diversas especies animales antes de venderlas al público.
Si bien los últimos datos oficiales brindados por las autoridades chinas hablan de 170 muertos, cifras provisorias señalan que la cantidad de decesos en ese país superó los 360.
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