Buen cine para disfrutar en casa. Foto: Cinéma Moderne.

Pandemia: las salas cierran, pero el cine sigue en línea

La escena artística multiplica las opciones en línea, como una forma de sortear los obstáculos al mundo del espectáculo que impone la pandemia del coronavirus.

En algunos casos se trata de formas, mecanismos, canales totalmente nuevos de expresión y, en otros, del paso obligado de la actividad al mundo digital, ante la imposibilidad del contacto cara a cara con el público.

Ese es el caso de Cinéma Moderne, que lanza a través de su plataforma digital una extensa lista de filmes y actividades.

Obligada a cerrar sus puertas por las restricciones puestas en vigencia a partir del 1 de octubre, la sala, ubicada en pleno centro de Montreal, desde donde cumple un rol central como difusora de cultura, persiste en su objetivo de llevar al público cine de calidad de aquí y de otros lugares.

Canción sin nombre, del Perú, que estará disponible en breve. Foto: Cinéma Moderne.

Con unas cuarenta películas ya disponibles en su plataforma en línea, la entidad independiente se ha impuesto mejorar su oferta de obras para descubrir en casa, con filmes de Canadá, América Latina, Europa, África y de otras latitudes.

Entre los títulos ofrecidas se encuentra Heimat is a Space in Time, del cineasta Thomas Heise, cuya proyección en sala estaba prevista a partir del 2 de octubre.  La cinta propone un recorrido a través de la historia familiar del realizador, que sirve de argumento para revisar la historia reciente de Alemania,

La proyección será acompañada por un encuentro a través de Zoom con el propio director, al que se sumará Barbara Thériault, integrante del Centro Canadiense de Estudios Alemanes y Europeos de la Universidad de Montreal, donde se marcarán los 30 de la unificación alemana.

Heimat is a Sapace in Time. Foto: Cinéma Moderne.

Moi sans toi, del realizador Guillaume Collin, Quebec, Canadá,  presenta la historia de Laurie y Olivier, cuya incipiente relación es afectada por la partida de la joven a España. Para Olivier comienza entonces el largo luto de un romance que ni siquiera ha comenzado. Collin explora las esperanzas y vulnerabilidades sentimentales de los veinteañeros a través de las pruebas y tribulaciones que los afectan mientras se buscan mutuamente.

Moi sans toi. Foto: Cinéma Moderne.

La rivière sans repos, de Marie-Hélène Cousineau, Quebec, Canadá, nos cuenta la historia de una mujer que, tras ser abusada, se convierte en madre apenas terminada la Segunda Guerra Mundial. Se trata de una adaptación de una obra de Gabrielle Roy, que traza el retrato de Elsa,  teñido de independencia, pero también de sacrificio.  El personaje central es una persona desgarrada a pesar suyo entre la tradición y la modernidad, entre su profunda identidad y la asimilación forzada a una sociedad que no se parece a ella.

La rivière sans repos. Foto: Cinéma Moderne.

Rojo, de Argentina, en coproducción con varios otros países, dirigida por Bejamín Naishtat, presenta una historia que se desarrolla en la década de 1970 en esa nación sudamericana. Un abogado reputado, que hace la vista gorda a las prácticas del régimen vigente, tiene un altercado con un extraño que cambiará su vida dramáticamente. El agresor, expulsado del pueblo donde ocurre el hecho y repudiado por los habitantes locales, buscará venganza, iniciando una espiral de violencia sin final aparente.

Rojo. Foto: Cinéma Moderne.

Caro diario, del afamado director italiano Nanni Moretti, quien se pasea por Roma en su pequeña moto, mientras va relatando episodios de su vida personal, en un diario íntimo que es relatado según su estilo particular. Un retrato de sí mismo y de quienes comparten con él el tiempo que les ha tocado vivir. Una película atrapante del director, entre muchas otras películas célebres, de Aprile, La stanza del figlio y Habemus papam, donde además personifica a un psicólogo encargado de tratar al papa electo, que sufre un ataque de pánico ante la vida que se le presenta como jefe de la iglesia católica.

Caro diario. Foto: Cinéma Moderne.

Vitalina Varela, de Pedro Costa, Portugal. Como es habitual en él, el director recurre a una actriz no profesional que representa su propia historia, la de una mujer de Cabo Verde que llega a Lisboa, para recoger los efectos de su marido, que había dejado su patria 25 años atrás para trabajar en Portugal y murió tres días antes de que ella pudiera estar a su lado. La cámara sigue a la protagonista, que recorre los rastros de su marido, mientras muestra la realidad de la diáspora africana y del legado de la violencia racial y colonial.

Vitalina Varela. Foto: Cinéma Moderne.

La grilla completa de películas puede verse en la página internet de Cinéma Moderne.

En los próximos días se sumarán otras novedades en el área de Cine en Línea, incluyendo las películas que se estaban proyectando en las salas en el momento de su cierre. 

Esos filmes se añadirán a una variada oferta de unas 40 películas disponibles, entre ellas Ghost Tropic, A Life in Waves, Searching for Ingmar Bergman, que son presentadas en exclusividad en la plataforma de la entidad.

Opciones no faltan a la hora de acceder al arte de calidad más allá de las limitaciones que impone la pandemia.

Categorías: Artes y espectáculos, Sociedad
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