Miembros de la Primera Nación Sipekne'katik en Saulnierville, Nueva Escocia, saludan a una embarcación después de lanzar su propia pesquería autorregulada el 17 de septiembre de 2020. Un fallo de la Corte Suprema de Canadá, conocido como la decisión Marshall, reconoció el derecho de los mi'kmaq a pescar y vender langostas de mar fuera de la temporada. Esto ha causado una serie de ataques e incendios de parte de los pescadores comerciales no indígenas. (Foto: LA PRENSA CANADIENSE/Andrew Vaughan)

Indígenas enfrentan violencia en Nueva Escocia por ejercer su derecho a pescar

Un nuevo capítulo de violencia contra las comunidades indígenas canadienses está ocurriendo en la provincia marítima de Nueva Escocia.

La causa del conflicto es que los indígenas mi’kmaq decidieron organizarse para llevar a cabo una moderada pesca de subsistencia de langostas, a lo cual los pescadores no indígenas canadienses se oponen.

Esta situación se remonta a agosto de 1993, cuando Donald Marshall Jr., miembro de la Primera Nación Membertou (Mi’kmaq), fue arrestado y acusado por violaciones a las normas de la pesca en Nueva Escocia por estar pescando sin permiso.

Marshall argumentó que los tratados de 1760 y 1761 consagraban su derecho a capturar y vender pescado. Este caso finalmente llegó a la Corte Suprema de Canadá, que en septiembre de 1999 dictaminó que los derechos de caza y pesca garantizados a los indígenas signatarios del tratado nunca se habían extinguido y, por lo tanto, los descendientes modernos de estos pueblos en las provincias marítimas y en Quebec no están sujetos a los reglamentos gubernamentales que rigen la caza, la pesca o el uso de la tierra.

Captura de pantalla de un video publicado en Facebook que muestra a un hombre agarrando y empujando al jefe indígena Mike Sack durante un altercado esta semana. (Foto: CBC /Facebook)

Este fallo de la Corte Suprema reconoce la protección constitucional de los derechos de caza, pesca y recolección de los indígenas mi’kmaq, wolastoqiyik y passamaquoddy en Nueva Escocia, la Isla del Príncipe Eduardo, Nueva Brunswick y Quebec.

Una de las consecuencias de ese fallo es que los pescadores indígenas pueden pescar en cualquier momento del año, mientras que los pescadores no indígenas sólo pueden hacerlo durante las temporadas autorizadas por las autoridades de gobierno. La definición de la envergadura de la pesca hecha por los indígenas es que esta debe ser par una “moderada subsistencia”, mientras que los pescadores no indígenas temen quedarse sin langostas para pescar.

Las tensiones entre los pescadores de las Primeras Naciones y los pescadores blancos estallaron el en el suroeste de Nueva Escocia estallaron el martes 13 de octubre por la noche cuando una turba de cientos de pescadores comerciales y sus partidarios asaltaron dos instalaciones donde los pescadores mi’kmaw estaban almacenando sus langostas capturadas.

Los pescadores se congregaron ese día más temprano en el condado de Digby y se dirigieron a un almacén de langostas en Nueva Edimburgo, donde, al anochecer, una camioneta fue incendiada, se robaron langostas y la instalación fue dañada.

Un ataque similar se produjo en Middle West Pubnico, en el condado vecino de Yarmouth, donde el pescador mi’kmaw Jason Marr se vio obligado a atrincherarse en un almacén de langostas mientras una turba destrozaba su vehículo y le exigía que entregue las langosta que había pescado en las aguas de la bahía de St. Marys.

En la mañana del  miércoles cientos de langostas muertas se hallaban esparcidas por el pavimento fuera del almacén mientras que los enfrentamientos continuaron todo el día.

La semana previa, un barco pesquero de los mi’kmaw fue destruido en un incendio sospechoso en un muelle de la comunidad de Comeauville.

Esos dos ataques se produjeron en respuesta a la puesta en marcha de una pesquería de langosta de «subsistencia moderada» por parte de la comunidad indígena de Sipekne’katik, fuera de la temporada comercial exigida por el gobierno federal.

El jefe de los Sipekne’katik, Mike Sack, y Brendon Coulstring, que trabaja en las instalaciones de Middle West Pubnico, criticaron la reacción de la policía federal canadiense, RPMC, el martes por la noche.

Coulstring dijo que los oficiales no respondieron hasta dos horas después de ser llamados, y Marr dijo que mientras la turba tiraba piedras a través de las ventanas y sacaba cajas de langosta, «ni un solo policía intentó detenerlos».

El pescador mi’kmaw Jason Marr Marr filmó cerca de una hora de video mientras se hallaba atrincherado dentro el almacén de langostas. Varios otros videos fueron compartidos en los medios sociales durante la noche, incluyendo uno que muestra una camioneta blanca incendiada en Nuevo Edimburgo. Marr dijo que su vehículo también fue destruido.

Una camioneta de un pescador mi’kmaw fue incendiada el martes por la noche en New Edinburgh, N.S., durante violentas protestas. (Riley Howe/Facebook)


«Cortaron los neumáticos. Vi a un tipo orinar en el asiento del conductor de mi camioneta. Otro tipo vertió una jarra de anticongelante o algo así dentro de mi tanque de gasolina. Otro tipo vertió una jarra de algo por los conductos de ventilación de los calentadores de mi camioneta»

Jason Marr, pescador mi’kmaw en Nueva Escocia.


Marr dijo que eventualmente, la RCMP lo tomó del brazo y lo obligó a salir del edificio, y se quedó afuera, observando como la turba rompía las ventanas y sacaba langosta en cajas. «Destruyeron totalmente ese edificio, lo destrozaron todo. Se llevaron toda la langosta», dijo.

Sack también dijo que la respuesta de la RCMP fue insuficiente, y está esperando que se presenten cargos contra los instigadores de los ataques contra los pescadores indígenas. La policía «no está haciendo bien su trabajo en este momento», añadió.

El portavoz de la RPMC, el sargento Andrew Joyce, dijo que no se habían hecho arrestos hasta el miércoles por la tarde, pero que los oficiales fueron testigos de la actividad criminal y que se estaban reuniendo equipos de investigación.

Zona de conflicto entre los indígenas mi’kmaw del Atlántico canadiense y los pescadores comerciales que se oponen a los derechos de los indígenas establecidos mediante tratados y ratificados por la Corte Suprema de Canadá. (Imagen: CBC)

En respuesta a las críticas contra la respuesta de la RCMP el martes, Joyce dijo que no creía que fuera justo decir que los oficiales no hicieron nada.

Por su parte, el primer ministro Justin Trudeau defendió la respuesta del gobierno federal a la escalada de violencia contra las actividades de pesca de los indígenas mi’kmaw en Nueva Escocia, señalando que Ottawa permanecía «extremadamente activa» en tratar de resolver la situación.

Trudeau pidió que se ponga fin a la violencia y el acoso que han ido en aumento durante la última semana en varias comunidades pesqueras de la parte sudoccidental de la provincia de Nueva Escocia.

El primer ministro canadiense Justin Trudeau durante una conferencia de prensa en Ottawa el 14 de septiembre de 2020. (Foto: REUTERS/Blair Gable)


«Esperamos que la Real Policía Montada de Canadá y los servicios policiales hagan su trabajo y mantengan a la gente segura. Creo que ha habido cierta preocupación de que eso no se ha hecho lo suficientemente bien y eso es ciertamente algo que vamos a mirar muy de cerca.»

Justin Trudeau, primer ministro de Canadá.


El miércoles, Trudeau twiteó que los actos de violencia cometidos el martes por la noche eran «inaceptables», y dijo «debemos trabajar juntos para avanzar en la reconciliación e implementar los derechos de los tratados de las Primeras Naciones».

El jueves, el jefe de la Primera Nación Sipekne’katik instó a Trudeau a intervenir y asegurarse de que los implicados en la violencia sean procesados.

Sack dijo que la respuesta del Primer Ministro le pareció hueca. «Las acciones hablan más fuerte que las palabras», dijo. «Haz tu trabajo…. Ven aquí, protégenos, y no twitees sobre ello».

El jefe de los Sipekne’katik, Michael Sack, se dirige a los pescadores mi’kmaw y a sus seguidores el jueves durante el lanzamiento de una pesquería de langosta indígena que los pescadores comerciales locales dicen que es ilegal. (Foto: Steve Lawrence/CBC)

Sack también dijo que ha contratado abogados y que iniciará acciones legales contra cualquier individuo o grupo «que esté interfiriendo con nuestro derecho a pescar» , incluyendo un hombre que lo agarró y lo empujó durante un altercado el miércoles en un almacén de langostas de Nueva Edimburgo.

El líder indígena dijo que la presencia policial no era suficiente para proteger a los pescadores de Mi’kmaw.


«Esto es realmente racismo sistémico. Si fueran 300 de los nuestros y 40 de los suyos, el lugar estaría lleno de policías. ¿A Trudeau le importa nuestra gente? ¿Le importa la reconciliación? Hablan de ello, pero no veo ninguna acción en ese sentido».

Mike Sack, jefe de los Sipekne’katik.


Fuentes: CBC / A. Cooke / E. Smith / T. Grant / Canadian Encyclopedia / Canadian Press / RCI

Categorías: Indígenas, Medioambiente y vida animal, Política, Sociedad
Etiquetas: , , , , ,

¿Encontró un error? ¡Pulse aquí!

Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.