En el otoño de 2020, el gobierno de Quebec anunció que suspendía temporalmente el programa de estudiantes internacionales refugiados, argumentando que tenía sospechas de que a través de éste se cometían fraudes, pero este martes el primer ministro Francois Legault anunció que los estudiantes sí podrán venir a esta provincia canadiense.
Legault dio la información solo un día después de que Radio-Canada reportara decepción por parte de profesores y estudiantes de los centros de estudios que recibirían a los jóvenes, en su mayoría con edades entre 18 y 25 años, provenientes de Jordania, Kenia, Líbano, Malawi, Tanzania y Uganda.
Cada año, Canadá recibe unos 130 estudiantes refugiados. De ese total, algunas docenas se instalan en Quebec. El Programa de Estudiantes Refugiados (PER), que funciona desde 1978, es manejado a través del Servicio Universitario Mundial de Canadá (WUSC por sus siglas en inglés) y se ejecuta gracias al trabajo mancomunado con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Los jóvenes se instalan en Canadá gracias al patrocinio y el financiamiento que logran los propios estudiantes de los centros donde estudiarán los refugiados, quienes hacen colectas de fondo para obtener los recursos. Es por ello que Rafaëlle Sinave, profesora del cégep del Viejo Montreal, dijo a Radio-Canada que se trata de un programa de y para los jóvenes. “Los jóvenes se están organizando para financiar a los jóvenes refugiados que se instalarán aquí”.
A través de su Facebook, Sinave aseguró que el hecho de que el gobierno de Legault reculara en su decisión era una victoria y que “nos encontraremos con los jóvenes estudiantes que esperamos en los campus de los cégeps y de las universidades (…) Se siente bien saber que las cosas pueden cambiar”.
Nadine Girault, ministra de Inmigración de Quebec, se había pronunciado más temprano, asegurando vía Twitter que estaba investigando la situación. “Sé lo importante que es -el programa- para las instituciones educativas que forman parte de éste. Pedí al ministerio trabajar en una solución tan pronto como sea posible”.
Le programme de Parrainage des étudiants réfugiés de l’UNHCR est important, et je sais à quel point il tient à cœur aux établissements d’enseignement qui y prennent part. J’ai demandé à mon ministère de travailler sur une solution le + rapidement possible.https://t.co/G1p1zU3CZz
— Nadine Girault (@NadineGirault) March 9, 2021
El gobierno de Legault había anunciado la suspensión del programa en otoño de 2020, por sospechas de supuestos fraudes cometidos en algunos programas de patrocinio colectivo. Foto: THE CANADIAN PRESS/Ryan Remiorz
La suspensión
Cuando en otoño de 2020 el gobierno anunció la decisión de suspender la llegada de estudiantes refugiados, la administración de Legault dijo que había preocupaciones con sobre posibles fraudes cometidos en algunos programas de patrocinio colectivo.
Pero ahora Inmigración Quebec aseguró que las sospechas de fraude no estaban vinculadas directamente a este programa en particular y que por ello dio luz verde para recibir a los estudiantes refugiados.
La suspensión había sido prevista hasta noviembre de 2021.
El rechazo a la decisión comenzó el año pasado. Entonces, Paul Clarke, director ejecutivo de Action Refugiés Montréal dijo que la decisión era desafortunada.
En el reportaje publicado esta semana por Radio-Canada, voceros de los centros educativos lamentaban que los refugiados que esperaban para este verano no podrían venir.
Varios voceros de las instituciones involucradas de Quebec habían informado a la ministra Girault sobre su preocupación.
La decisión del gobierno de Legault, además, había sido criticada por los otros partidos políticos que hacen vida en la Asamblea Nacional.
Christine St-Pierre, crítica de inmigración del Partido Liberal de Quebec, había asegurado que la suspensión era “inhumana e injusta». El gobierno mete a todos en el mismo saco”.
Por su parte Andrés Fontecilla, vocero en materia de Inmigración de Québec Solidaire, dijo también al medio público que la decisión era “una injusticia, tanto para los jóvenes refugiados, como los jóvenes quebequenses que se movilizan para organizar su llegada”.
Con la marcha atrás de la decisión, se espera entonces que los estudiantes internacionales refugiados puedan recibir cursos en unas 20 instituciones quebequenses, algunas de ellas ubicadas en Montreal, pero otras en regiones como Alma, Matane y Sherbrooke.
Desde la creación del PER más de 2000 jóvenes refugiados han recibido apoyo para seguir con su educación en los centros educativos canadienses.
RCI con información de Radio-Canada y el Programa de Estudiantes Refugiados (PER)
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