Además de las críticas debido a las demoras en la campaña de inoculación, las vacunas para combatir el coronavirus se han convertido en un foco de conflicto entre los políticos y la jerarquía del catolicismo local.
Todas las fuerzas políticas representadas en la Asamblea Nacional, como se conoce a la legislatura de la provincia de Quebec, denunciaron los propósitos vertidos por los obispos en un comunicado, en el que relacionaban a algunas de las vacunas contra el Covid con los abortos.
El ministro de Salud pidió a la gente que escuche a los científicos. THE CANADIAN PRESS/Paul Chiasson
La declaración difundida por la Conferencia de Obispos Católicos de Canadá invitó a los fieles de ese credo a evitar la inoculación con las dosis desarrolladas por los laboratorios AstraZeneca y Johnson & Johnson, a los que acusó de haber utilizado células de fetos abortados en la composición de sus productos.
La declaración fue repudiada por todos los partidos de la Asamblea, incluyendo a los representantes del oficialismo.
El ministro de Salud, Christian Dubé, denunció los propósitos de la jerarquía eclesial e invitó a la gente a guiarse por los consejos e indicaciones de los expertos, que en términos generales sostienen que dichas vacunas son eficaces para contener el avance de los contagios.
Los obispos sostuvieron que los fieles deberían preguntarse si es moralmente aceptable recibir las vacunas de sendos laboratorios.
Del mismo modo, la Conferencia no dudó en promover las dosis producidas por Pfizer y Moderna, a las que señaló como de su preferencia.
La Asamblea Nacional repudió los dichos de los jefes católicos, a los que acusó de haber tenido una actitud irresponsable, en momentos en que los efectos de la pandemia aún no han sido neutralizados y cuando miles de personas se han contagiado o fallecido por efecto de la enfermedad.
El repudio en la Asamblea Nacional fue unánime. THE CANADIAN PRESS/Jacques Boissinot
La jefa del Partido Liberal, Dominique Anglade, rechazó también el pronunciamiento de los sacerdotes, por oponerse al discurso de la ciencia y también calificó los dichos de irresponsables, en momentos en que las autoridades buscan la forma de lograr vacunar a la mayor cantidad de gente, para crear un escudo de inmunidad respecto del Covid-19.
Por su parte, Quebec Solidario, a través de su portavoz, Gabriel Nadeau-Dubois, afirmó que los términos expresados por los integrantes de la Conferencia son lamentables.
Nadeau-Dubois destacó que las personas que tienen un grado de autoridad moral deberían asumir su responsabilidad y no afectar ni directa ni indirectamente la confianza de la gente en las vacunas.
Por su parte, el jefe del Partido Quebequense, Paul St-Pierre Plamondon, sostuvo que todas las vacunas autorizadas por la autoridad sanitaria son seguras y deben ser utilizadas.
Fuente: The Canadian Press.
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