Hoy, hace un año que el periodista canadiense Mohamed Fahmy fue arrestado junto a otros dos colegas de la cadena de televisión Al-Jazira.
El comunicador apeló la condena pronunciada por un tribunal egipcio –a 7 años de cárcel- y el proceso se realizará este 1 de enero.
Mohamed Fahmy, Peter Greste y Baher Mohamed fueron condenados luego de que el régimen del presidente egipcio Al-Sissi los acusara de ser partidarios de los llamados Hermanos Musulmanes, una organización que fue declarada terrorista por el gobierno de Egipto.
Según las acusaciones del gobierno egipcio, los periodistas habrían “fabricado imágenes de video” para “afectar la seguridad nacional”.
Los tres periodistas rechazaron las acusaciones y dijeron que sólo habían hecho su trabajo.
La asociación Periodistas Canadiense por la Libertad de Expresión pidió al gobierno de Abdel Fattah Al-Sissi liberar a los tres reporteros de Al-Jazira.
Además, el colectivo de periodistas canadienses mostró su satisfacción luego de que el ministro de Relaciones Exteriores de Canadá, John Baird, anunciara que viajará a Egipto para ocuparse del caso de Mohamed Fahmy.
Para organismos internacionales de defensa de los Derechos Humanos –como Amnistía Internacional- el proceso que llevó a la condena de los tres periodistas fue una verdadera “mascarada” y consideran que los reporteros son “prisioneros de opinión”.
En noviembre pasado, el presidente Al-Sissi aseguró que se estaban llevando a cabo discusiones sobre la posibilidad de que se le otorgara una amnistía presidencial a los tres periodistas.
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