Díaz-Canel sucedió a Raúl Castro a la cabeza del gobierno de Cuba. REUTERS/Marco Bello.

Cuba no ve pronta mejoría en su relación con Estados Unidos

El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, dijo que su país no llevará adelante un diálogo con el gobierno de Estados Unidos, mientras la administración Trump siga teniendo una actitud que calificó de “anormal” hacia su país.

El mandatario cubano hizo las declaraciones en el marco de la primera entrevista que concedió a un medio periodístico desde que asumió el poder en abril último.

Las relaciones entre ambas naciones se enfriaron en los últimos tiempos, luego que Washington acusó al gobierno cubano de haber lanzado un ataque con armas sonoras contra su embajada en La Habana.

El proyecto de nueva constitución no habla de comunismo pero mantiene su mención al socialismo. Foto: Abel Padron, Agencia Cubana de Noticias via AP.

Díaz-Canel sostuvo que su país quiere un diálogo, pero que el mismo debe ser entre iguales. “No aceptamos imposiciones y no estamos dispuestos a hacer concesiones”, afirmó.  Las declaraciones fueron formuladas a la cadena de televisión Telesur, con sede central en Venezuela.

La llegada de Donald Trump a la Casa Blanca significó una marcha atrás en la reconstrucción de las relaciones entre ambos países, iniciada bajo la administración de Barack Obama, con quien se llegó a la restauración de vínculos diplomáticos plenos, que tuvo su punto culminante en la reapertura de las representaciones diplomáticas de ambos países. La embajada de Estados Unidos en Cuba volvió a funcionar en julio de 2015, luego de haber cerrado casi 50 años antes, tras el triunfo de la Revolución Cubana.

Las acusaciones de las autoridades estadounidenses, responsabilizando al gobierno cubano por los ataques contra el personal de su embajada, que habrían provocado problemas de salud a numerosos funcionarios, pusieron aún más distancia entre ambas naciones.

Durante la entrevista, el mandatario hizo referencia en varias ocasiones a sus predecesores, Fidel y Raúl Castro, al mismo tiempo que defendió sus vínculos con Venezuela y saludó la elección de Andrés Manuel López Obrador como próximo presidente de México.

La comunidad LGBT de la isla es uno de los principales impulsores del matrimonio igualitario. REUTERS/Stringer.

El mandatario también abordó el tema de la reforma constitucional, sosteniendo que el hecho de que el borrador de la futura carta magna, que está siendo actualmente debatido, no contenga mención al comunismo, como sistema político del país, no significa que las autoridades de la isla hayan renunciado a sus aspiraciones y convicciones políticas.

En relación con el mismo tópico, el presidente  se pronunció a favor de incluir en la próxima constitución el derecho al matrimonio entre personas del mismo sexo, tema que hasta hace uno años era rechazado de plano por las autoridades cubanas.

Al respecto, el jefe del gobierno cubano dijo que está a favor de eliminar todo tipo de discriminación en su país, aunque dependerá de la voluntad de los cubanos si el tema del matrimonio igualitario es finalmente tomado en cuenta o no.

El proyecto de constitución incluye también, por primera vez desde el triunfo de la revolución, el derecho a la propiedad privada.

Categorías: Internacional, Política
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