En Canadá, los inmigrantes tienen algunas características de salud distintas de las personas no inmigrantes. Esto es lo que se desprende de un boletín de salud del Institut de la statistique du Québec que presenta un retrato de la salud de los inmigrantes mayores de 18 años, por sexo y duración de residencia en Canadá.*
Entre los comportamientos que se destacan:
- Es menos probable que fumen cigarrillos
Los inmigrantes son menos propensos a fumar cigarrillos ocasional o regularmente que los nacidos en Canadá, especialmente las mujeres. En 2014-2015, la proporción de fumadoras de 18 años o más era de aproximadamente el 9% entre las mujeres inmigrantes recientes (las que llegaron hace 10 años o menos), el 12% entre las inmigrantes de larga duración y el 20% entre las mujeres nacidas en Canadá.
- Menos probabilidades de consumir cannabis
Los inmigrantes tienen menos probabilidades de haber consumido cannabis ocasional o regularmente durante un período de 12 meses, en comparación con los canadienses nativos. En 2014-2015, casi el 6% de los inmigrantes recientes, el 7% de los inmigrantes de larga duración y el 16% de los consumidores de cannabis nacidos en el Canadá de 18 años o más eran consumidores de cannabis.
- Es menos probable que tenga sobrepeso, pero más probable que sea sedentario
Los inmigrantes recientes tienen menos probabilidades de tener sobrepeso que los canadienses nativos, especialmente los hombres.- Sin embargo, el panorama es menos ventajoso cuando se trata de los niveles de actividad física. Los inmigrantes recientes y de larga duración tienen más probabilidades de ser sedentarios que los nacidos en Canadá, una vez que se tienen en cuenta sus características sociodemográficas. Esto significa que es menos probable que estén físicamente activos al menos una vez a la semana (deportes, actividades al aire libre, acondicionamiento físico, baile o caminatas) y que usen transporte activo.
- Es más probable que hayan usado un condón durante las relaciones sexuales que los canadienses nativos.
Los inmigrantes, tanto hombres como mujeres, tienen más probabilidades de haber usado un condón en sus relaciones sexuales durante un período de 12 meses. Esta diferencia puede estar asociada en parte con un menor uso de otros métodos anticonceptivos, como la píldora y la vasectomía.
*Aunque el documento fue presentado con un enfoque especial en los inmigrantes en la provincia francófona, los resultados hablan específicamente de esos inmigrantes en comparación con la población nacida en Canadá.
(Foto: ©iStock/FatCamera)
Entre más recientes, más sanos
Éste y otros estudios sugieren que la diferencia en los problemas de salud entre los inmigrantes a Canadá varía con el tiempo desde el su llegada al país.
Los inmigrantes recientes tienden a ser más sanos. La Agencia de Estadísticas de Canadá considera que esto puede deberse al examen médico y a la verificación de la admisibilidad exigida por las autoridades de inmigración u otros factores.
Cabe recordar que desde 2002, la Ley de Inmigración y Protección de los Refugiados exime a los refugiados y a determinados miembros de la clase familiar de los requisitos de admisibilidad médica.
Desde que este cambio entró en vigor, se han realizado pocas investigaciones para examinar la salud de los refugiados y de algunos miembros de la clase familiar regida por la ley. Esto se debe en parte a la falta de datos.
(Foto: ©iStock/FatCamera)
Un estudio de Estadísticas Canadá con conclusiones similares
En abril del 2019, Chaohui Lu y Edward Ng, investigadores de la agencia llegaron a la conclusion que la ventaja sanitaria (mejor salud) observada entre los inmigrantes de 20 a 65 años se ha mantenido, por categoría, entre los inmigrantes más recientes que se han establecido en Canadá desde la entrada en vigor de la nueva ley.
Esta ventaja es significativa entre los inmigrantes de clase familiar en comparación con los nacidos en Canadá para la mayoría de las medidas de salud seleccionadas.
Entre los refugiados, la ventaja sanitaria se observó sólo entre las mujeres con un problema de salud crónico menos grave, mientras que, como se esperaba, se observó un efecto significativo de inmigración saludable entre los principales solicitantes de la clase económica.
El estudio, basado en un conjunto de datos recientemente vinculado, midió el lo que llaman el Efecto de Inmigrantes en Buena Salud para determinados problemas de salud crónicos y sobrepeso, tanto para todos los inmigrantes como para aquellos que habían llegado recientemente bajo la Ley de la Inmigración y la Protección de Refugiados.
Los resultados varían según la categoría de inmigrantes, siendo el Efecto de la Inmigración en Buena Salud más pronunciado entre los inmigrantes de clase familiar y mucho más bajo entre los refugiados, un grupo que puede requerir una mayor vigilancia de la salud.
RCI con informaciones del Instituto de Estadísticas de Quebec y de la Agencia de Estadísticas de Canadá
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