Guadalupe, una madre migrante cuyos dos hijos fueron deportados y con hijo aún indocumentado con ella aquí en Canadá, quiso compartir su testimonio con RCI.
El Día de la Madre es una celebración un acto para alegrarse y celebrar a las madres de todo el mundo en el que las personas que tienen. Su madre la visita, la hacen feliz, pero no es el caso de todas las madres, de algunas madres migrantes que luchan por sus derechos y los de sus hijos, no siempre de las que buscan una mejor vida y una mejor oportunidad para sus hijos libres de la violencia de la delincuencia intrafamiliar e incluso de la policía. Es una fiesta en la que muchas madres, como yo, no pueden disfrutar de la presencia y la compañía de sus hijos a causa de la inmigración, la deportación y, más aún, de la pandemia que asola el mundo y de las políticas económicas de los países ricos y pobres. Muchas madres que, como yo, han luchado y trabajado con todas sus fuerzas por sus hijos y se han enfrentado a la inhumanidad de estas políticas de inmigración que no tienen un criterio unificado y son injustas y tienen unas expectativas muy largas.Guadalupe, madre migrante
Este Día de las Madres, lo hemos pasado sin nuestros hijos o lejos de nuestras madres, dijo Guadalupe, agregando que esa es la triste realidad de muchas madres inmigrantes.
Rosa, otra mujer migrante también hizo estos comentarios a pocos días de la celebración.
Se acerca el día de las madres y como muchos inmigrantes no podré abrazar a la mía. Es un sacrificio más de nosotros los inmigrantes que vivimos lejos de nuestros seres queridos por buscar un mejor futuro para nuestros hijos.. Habemos muchos que soportamos malos tratos ,y racismo, por nuestras familias que dejamos atrás. Así es como nosotros los inmigrantes estamos dispuestos a vivir en otro país donde no somos bienvenidos, no somos considerados esenciales pero si trabajamos duro haciendo el trabajo que muchos ciudadanos no quieren hacer nosotros lo hacemos.. es injusto que no nos valoren como seres humanos pero no perdemos la fe y esperanza que algún día nuestras voces serán escuchadas..Todos merecemos una mejor vida un status en este país no solo para trabajar si no como seres humanos . Un status para todos. Todos somos iguales.Rosa Morales,madre migrante
Las manifestantes, sus allegados y sus aliados también denunciaron lo que ellos llaman «la injusticia del nuevo programa de residencia permanente» en el que se ofrecía posibilidad de solicitarla a 90 000 trabajadores temporales y estudiantes extranjeros ya instalados en Canadá.
Todo el mundo tiene derechos y merece dignidad y protección, pero el nuevo programa de residencia permanente anunciado por el gobierno federal excluye a la mayoría de los inmigrantes. Extracto del comunicado del organismo Migrant Rights Network
Afiche de la manifestación de la movilización del Día de Acción por las Madres sin estatus migratorio. (FOTO: MIGRANTS RIGHTS NETWORK)
MARCHA NACIONAL
La manifestación del domingo fue anunciada como el preludio a la marcha en solidaridad con los indocumentados que tendrá lugar este verano.
Una peregrinación solidaria (nueva ventana)
de siete días desde Montreal a Ottawa, separadas por 200 kilómetros de distancia, tendrá lugar del 18 al 25 de julio del 2021.
Esta marcha está organizada por los inmigrantes indocumentados de Montreal. Llevan sobre sus hombros las esperanzas de los miembros de la comunidad indocumentada de todo el país. Luchan colectivamente contra la violencia del sistema de inmigración canadiense, pero también a diario cuando el sistema se inmiscuye en sus vidas. Muchos no pueden pagar el alquiler, comprar alimentos o pagar las necesidades médicas urgentes. Esto está directamente relacionado con su estatus: no tienen acceso a permisos de trabajo, asistencia sanitaria, subsidios de guardería, asistencia social o cualquier otra forma de ayuda gubernamental. Tras más de un año de pandemia, los trabajos disponibles para ellos son escasos, y los que hay tienen condiciones muy precarias. Organismo Solidaridad sin frontera (Solidarité sans frontières / Solidarity Across Borders)
La invitación a participar en la marcha se hizo extensiva a todos, independientemente de su situación en Canadá: indocumentados, trabajadores temporales, refugiados, trabajadores agrícolas, cuidadores, estudiantes extranjeros, incluso residentes y ciudadanos.
Un reportaje de Paloma Martínez, para RCI, con informaciones de los organismos Solidarité sans frontières y el Migrants Rights Network.
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