El encuentro del Origami con la danza Butoh

publicado en: Cartelera, Reportajes | 0
Milton Tanaka

Haber aprendido Butoh con mi maestro Kazuo Ohno me ayudó mucho a interpretar mi papel en Origami.  La danza Butoh implica una  gran preparación física y sicológica lo que me ayudó mucho en las escenas de lucha física muy intensa y en la interpretación de un japonés misterioso.

-Milton Kanata, actor

Recientemente se estrenó en Canadá la película Origami del director quebequense Patrick Demers. Un hombre viaja en el tiempo, continuamente entre el pasado y el presente,  para cambiar su vida marcada por un drama.

El personaje central es un joven restaurador de obras arte asiáticas, que tiene el don de plegar el tiempo como un origami.

En ese viaje por comprender finalmente su vida y mantener vivo a un ser querido, es ayudado por un japonés algo extraño, interpretado por Milton Tanaka.

Tengo formación de estudios en danza contemporánea Butoh, en Japón, con el gran maestro  Kazuo Ohno. Leyendo el guión me encantó la historia Origami escrita por  Claude Lalonde.

El bailarín japonés de Butoh, Kazuo Ohno, (1906 – 2010) realiza su ‘Admirando a la Argentina’ en el Joyce Theatre, Nueva York, Nueva York, el 20 de noviembre de 1985. Getty Images

El origami (折り紙) es un arte que consiste en el plegado de papel sin usar tijeras ni pegamento para obtener figuras de formas variadas, muchas de las cuales podrían considerarse como esculturas de papel.

Yo soy el gaman, un personaje muy misterioso, un doctor en sicología, aunque no se sabe exactamente qué hago con François. ¿Una experiencia científica? ¿Quiere hacer el mal o el bien? La historia tiene varios niveles de lectura y de interpretación. Fue muy difícil, muy exigente interpretarla.

François Arnaud es el actor principal de Origami, muy conocido por su papel en la serie Borgia.

La producción de una película en Quebec no sobrepasa generalmente los 5 millones de dólares. No hay entonces mucha preparación, coaching, por falta de presupuesto. Pero me ayudó mucho haber aprendido la danza Butoh, una danza contemporánea japonesa que proporciona una  gran preparación física y sicológica. Eso me ayudó mucho en las escenas de lucha física muy intensa.

Su papel en Origami le llevó dos semanas de trabajo, con horarios muy locos, dice, que podía comenzar a las 8 de la mañana para terminar a las 5 de la mañana del día siguiente.

Milton Tanaka

Una experiencia humana intensa

Tenía que concentrarme en el aspecto espiritual del personaje para interpretarlo, hubo momentos en que tenía que actuar como un japonés viejo, misterioso. Tuve mucho apoyo del director fotográfico Tobie, que tiene un ojo muy preciso para las tomas, como un cirujano. También del escritor Claude Lalonde. Esto no es como Hollywood, con presupuestos de centenares de millones, donde hay apoyo de un coach que indica cómo hablar, moverse, para interpretar el personaje. Para mí fue muy importante recibir el apoyo del equipo técnico.

Actores estereotipados

Milton nació en Brasil, de padre japonés y madre brasileña-japonesa.

Esta actuación ¿le permitirá a Milton Tanaka desarrollar otros papeles en proyectos cinematográficos en Quebec? ¿Le abre puertas?

“No creo. Yo tuve mucha suerte porque el guión indicaba específicamente que buscaban un japonés de mi edad, entre 40 a 50 años, que también hablara japonés, con aires un poco misterioso, entonces fue como un papel creado para mí.  Pero no sé si otras producciones quebequenses ..hay que salir del círculo vicioso de las minorías visibles y poder jugar cualquier tipo de papel.  No solo un japonés, un latino, un negro, un árabe. Pero comparado con años anteriores, esa mentalidad está cambiando, pero hace falta más”.

La película fue filmada totalmente en Montreal.  Milton explica también los diferentes sitios que sirvieron como marco para la filmación.

Esto y más en la entrevista que Milton Tanaka mantuvo con Leonora Chapman, de Radio Canadá Internacional.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *