Numerosas fuentes provenientes del interior del Centro de Vigilancia de la Inmigración de Laval confirmaron que una guardia de seguridad fue diagnosticada positivo de COVID-19.
La empleada de la compañía de servicios en seguridad GARDA, fue aparentemente puesta en cuarentena, así como todos los otros y otras guardias que trabajaron con ella el mismo día. Se intentó obtener información por teléfono por parte del personal de la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá (ASFC) de este centro de detención de migrantes, pero se negaron a confirmar o negar la noticia.
Recordemos que durante las últimas semanas, detenidos en el Centro de Vigilancia de la Inmigración de Laval presentaron una petición solicitando su liberación inmediata por temor de contraer el virus COVID-19. Después comenzaron una huelga de hambre para atraer la atención del público sobre la falta de medidas para protegerlos del nuevo Coronavirus. Sus llamados a la liberación de todas y todos los detenidos recibieron un apoyo público masivo de todo Canadá, pero no recibieron ninguna respuesta oficial de parte de Bill Blair, ministro de Seguridad Pública de Canadá.
Algunos fueron liberados pero en la actualidad, los otros 22 migrantes que siguen detenidos en el Centro de Laval, varias decenas de hombres y mujeres migrantes se encuentran detenido(a)s en cárceles provinciales y en otros centros de detención de Canadá.
Según el comunicado de la organización de defensa de los derechos humanos, Solidaridad sin Fronteras, la ASFC sigue ignorando la seguridad de las y los detenidos y la urgencia de la situación. En su lugar, la ASFC sigue utilizando las audiencias de revisión de motivos de la detención a un ritmo un poco más acelerado, pero perfectamente inadecuado, dice Solidaridad sin Fronteras. Las deportaciones han sido suspendidas pero no ha habido una suspensión oficial de nuevas detenciones.
Varias agencias de salud han prevenido a Canadá sobre una potencial eclosión de COVID-19 en los Centros de detención y las cárceles. La Organización Mundial de la Salud, OMS, exhortó a todos los gobiernos a liberar a las y los migrantes para prevenir una situación catastrófica tanto a nivel de la salud como de los derechos humanos de los detenidos.
Ante la multiplicación de los casos de COVID-19 en las cárceles y centros de detención a través de todo Norteamérica se requieren acciones urgentes. Solo la liberación inmediata de las y los migrantes de los Centros de Vigilancia de la Inmigración, de las cárceles y otros establecimientos, con un acceso a una vivienda apropiada y segura después de su lberación, puede prevenir un desastre de salud pública, concluye el comunicado de Solidaridad sin Fronteras.
Cuestionado con respecto a esta problemática por los periodistas durante su rueda de prensa diaria este martes 7 de abril, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau se limitó a decir que se está siguiendo de cerca este expediente y que se han tomado medidas para proteger tanto a los detenidos como al personal carceral para minimizar la infección.
RCI/solidarityacrossborder.org/Internet
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