Las bacterias de la flora intestinal pueden influenciar el funcionamiento del cerebro. Foto: iStock

Confirman relación entre el Alzheimer y la flora intestinal

Investigadores suizos e italianos confirmaron que existe una correlación entre el Alzheimer y el desequilibrio de la flora intestinal.

Esto porque el desequilibrio de la microbiota intestinal genera placas amiloideas en el cerebro, las cuales son las responsables de la aparición de este tipo de demencia,  la más frecuente en el mundo. 

En Canadá son unas 564 000 personas las que sufren esta enfermedad. Según las proyecciones de la Sociedad de Alzheimer de Canadá, en 15 años habrá 937 000 personas con Alzheimer en el país.

De vieja data

Desde hace años se ha hablado del intestino como el “segundo cerebro”. La sospecha de la correlación entre la flora intestinal y el desarrollo de Alzheimer es de vieja data. Investigadores aseveran que las proteínas producidas por ciertas bacterias que se encuentran en los intestinos y que han sido identificadas en la sangre de las personas enfermas, modifican la interacción entre el sistema inmunitario y el sistema nervioso.

El neurólogo Giovanni Frisoni, especialista de la Universidad de Ginebra, explicó que los expertos ya habían demostrado que el perfil de la microbiota intestinal de los pacientes de Alzheimer se observa alterado, respecto a las personas que no tienen la enfermedad. La diversidad de los microbios en las personas enfermas con este tipo de demencia es reducida.

“También habíamos descubierto una asociación entre un fenómeno inflamatorio detectado en la sangre, ciertas bacterias intestinales y la enfermedad de Alzheimer”, agregó el especialista a través de un comunicado de prensa.

Recordemos en este punto que las bacterias de la flora intestinal pueden influenciar el funcionamiento del cerebro y actuar a favor de una degeneración de diversas maneras.

Una de las formas en las que pueden influir es en la regulación del sistema inmunitario y modificar su interacción con el sistema nervioso. 

Los investigadores han hallado en las placas amiloideas proteínas llamadas lipopolisacárido (LPS), o endotoxina, que se encuentran  en la membrana de las bacterias con propiedades proinflamatorias. También han sido ubicadas alrededor de los vasos cerebrales de las personas con Alzheimer.

Asimismo, la flora intestinal produce metabolitos que tienen propiedades neuroprotectoras y antiinflamatorias, que afectan -directa o indirectamente- las funciones cerebrales.

La doctora Moira Marizzoni, coautora de los trabajos publicados e investigadora en el Centro Fatebenefratelli de Brescia, Italia, explicó por su parte que ciertas bacterias de la flora intestinal están vinculadas a la cantidad de placas amiloideas en el cerebro. Esto ocurre gracias al sistema sanguíneo, que transporta determinadas proteínas hasta el cerebro.

Lea también:

Los investigadores trabajarán ahora en identificar las bacterias que intervienen en este fenómeno. Foto: The Canadian Press

Próximos pasos

Tras esta conclusión, los investigadores deben abocarse a identificar las bacterias que intervienen en este fenómeno. Lo confirmado hasta ahora podría establecer las bases para nuevas estrategias preventivas, especialmente con un mayor control de la flora intestinal de las personas con mayor riesgo.

Se podría incentivar la administración de un cóctel bacteriano o incluso de probióticos para alimentar las bacterias necesarias en intestino, reporta Radio-Canada.

Para ello, los investigadores deben primero identificar las bacterias necesarias para el cóctel, de lo contrario, el efecto neuroprotector podría no ser eficaz, salvo si la enfermedad se encuentra en  estado muy precoz.

Los expertos explican que es por ello que un diagnóstico temprano siempre será mejor, algo que sigue siendo un reto cuando se habla de enfermedades neurodegenerativas.

Quienes deseen la investigación pueden hacerlo (en inglés) en este enlace.

Fuente : IOS Press, Radio-Canada

 

Categorías: Salud, Sociedad
Etiquetas: , , , , , , , , , , ,

¿Encontró un error? ¡Pulse aquí!

Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.